01 julio 2021

8 productos para el hogar que afectan la tiroides.

 






Las pastas de dientes y los productos antibacterianos podrían contener un ingrediente que, si bien ayuda a eliminar determinados microorganismos, podría ser muy perjudicial para el funcionamiento de la glándula tiroidea

La tiroides es una glándula pequeña en forma de mariposa que se encuentra ubicada justo en la parte inferior del cuello. Esta cumple una función muy importante al ser la responsable de los procesos metabólicos del cuerpo. El uso de ciertos productos para el hogar podría influir en la aparición de problemas tiroideos por la cantidad de químicos y toxinas que los componen.

Por eso, evitar o reducir su uso podría ser una forma de reducir los riesgos de sufrir por este tipo de problemas.

Productos que podrían causar tiroides

Cuando hay alteraciones en la glándula tiroideamuchos órganos del cuerpo se pueden ver afectados. Como consecuencia se puede disminuir la calidad de vida por la aparición de diferentes trastornos y enfermedades.

La exposición a ciertas toxinas es una de las causas principales del incremento de los problemas en la glándula tiroidea.

Llevar un plan de alimentación saludable puede contribuir a disminuir el impacto de las toxinas en el cuerpo. Sin embargo, hay otros hábitos y productos que se ignoran y que también podrían afectar su funcionamiento.

Minimizar la toxicidad es importante para prevenir esta alteración, sin olvidar consultar a su médico de cabecera o quiropráctico si usted cree que puede tener síntomas de tiroides.

Pesticidas

persona rociando pesticida

Varios estudios han podido determinar que las personas que están en contacto de una u otra forma con ciertos pesticidas tienen mayor riesgo de sufrir problemas en la tiroides.

Uno de esos estudios se realizó con mujeres casadas con hombres que usan pesticidas en su trabajo diario en Iowa y Carolina del Norte (Estados Unidos).  Se encontró que cerca del 20 % de las mismas padecían algún problema relacionado con la tiroides. Así, se concluyó que las personas expuestas a estos pesticidas tenían un riesgo mayor de tener problemas tiroideos.

Algunos de los productos analizados fueron los antifúngicos o el clordano. Estos demostraron que aumentaban el riesgo de padecer problemas de tiroides. Con todo, todavía se desconoce la causa exacta.

Sin embargo, un reciente estudio de la Universidad de Almería sí que corroboraría la correlación entre el uso de pesticidas y el desarrollo de padecer tiroides.

Retardantes de llama

Los retardantes de llama o polibromodifenil éteres (PBDE) pueden causar alteraciones en el funcionamiento de la glándula tiroidea.

Este tipo de productos se encuentran en las pantallas de televisión y de computadoras. También podemos encontrarlos en la espuma utilizada en muebles y relleno de alfombras.

Por si fuera poco, los PBDE están relacionados con problemas de comportamiento y de desarrollo. Esto se debe a que la glándula tiroidea está relacionada con el sistema nervioso. Así lo verificaría este artículo del Acta Pediátrica Española sobre los neurotóxicos ambientales.

Lo mejor es sustituir los productos que los contengan por otros sin ellos.

Plástico

botellas de plástico aplastadas

Además de tener un impacto negativo en el cuerpo, los plásticos pueden ser peligrosos para el funcionamiento del organismo.

Una de las preocupaciones relacionadas con la salud es una sustancia química que se filtra a partir de botellas de plástico. Esta se conoce como antimonio.

Científicos de la Universidad de Copenhague encontraron antimonio en las bebidas de frutas y zumos en botellas de plástico. Además, estos se encontraron en niveles de 2,5 veces superiores a lo que se considera seguro.

También se ha comprobado que ciertos ftalatos en algunos plásticos pueden afectar al funcionamiento de la tiroides.

Antiadherentes

Algunos antiadherentes están compuestos por ácido perfluorooctanoico (PFOA). Este químico se utiliza en la fabricación de teflón, envoltorios de comida y otros productos de uso habitual en el hogar.

Según un estudio realizado por especialistas británicos, este químico puede afectar a la tiroides incluso si esta se expone a niveles moderados. Por eso, es mejor evitar su uso.

Pastas de dientes con triclosán

Algunas pastas de dientes populares contienen un ingrediente conocido como triclosán. Este podría afectar el funcionamiento de la tiroides, la testosterona y los estrógenos, además de evitar que algunos antibióticos funcionen.

Esto se debe a que interfiere con las hormonas producidas por la tiroides. Además, podría alterar el desarrollo normal del sistema reproductivo y del metabolismo.

No obstante, se siguen haciendo pruebas que demuestren si en verdad habría una correlación entre la tiroides y este microbiano.

Si requieren más información acerca de los recientes estudios, les recogemos este artículo de la Red de Revistas Científicas de América Latina, el Caribe, España y Portugal.

Productos antibacterianos

mujer aplicándose crema

Existen jabones y lociones antibacterianas que también contienen triclosánAsí lo corroboraría este estudio realizado por Endocrine Society.

El triclosán actúa como un antibiótico para controlar las bacterias que se proliferan en pies, manos, dientes y otras áreas del cuerpo. Sin embargo, puede ser dañino para otras funciones del cuerpo como es el caso de la glándula tiroidea.

Metales pesados

Muchos productos químicos que se utilizan en el hogar tienen cierta cantidad de metales pesados como el mercurio, el plomo y el aluminio. Estos, al disparar contra los anticuerpos, pueden conducir a trastornos autoinmunes de la tiroides, como las enfermedades de Hashimoto y Graves-Basedow.

Científicamente, está demostrado por este artículo redactado en la Revista Bioagro, donde expone el potencial riesgo que pueden presentar los metales pesados para nuestra salud.

Soja

La soja contiene fitoestrógenos en sus proteínas, los cuales pueden inhibir la peroxidasa tiroideaUn reciente estudio de la Universitat de les Illes Balears, demuestra esta creencia.

Lo que hace este producto es interrumpir la función normal de la tiroides. Esto se debe a que bloquea la capacidad del cuerpo de utilizar yodo. Este es el proceso mediante el cual se producen las hormonas tiroideas.

Con todo, no hay pruebas concluyentes de que la soja sea 100 % perjudicial para los adultos. Lo mejor es reducir su consumo y consultar a nuestro médico para que nos recomiende la dosis más adecuada en caso de tener problemas de tiroides.

Otra desventaja de la soja es que en la actualidad mucha está genéticamente modificada (OGM). Esto también podría estar influyendo en su impacto negativo para la salud. Lo ideal, en esta situación, sería optar buscar productos naturales.

Consejos para bajar de peso que realmente funcionan.


Facilisio.com

Además de adoptar hábitos de alimentación sanos, como hacer cinco comidas al día, y practicar ejercicio, el descanso también es fundamental para no aumentar de peso.

Adelgazar, no solo beneficia en lo estético, también es positivo para la salud. ¿Quieres leer algunos de los mejores consejos para bajar de peso que realmente funcionan? Estos consejos están respaldados por estudios científicos y nos pueden ayudar a perder algunos kilos y ponernos en mejor forma.

1. Haz deporte

La investigación científica ha demostrado que, además de la quema de calorías y mejorar la salud, el ejercicio reduce los niveles de estrés y ayuda a perder peso. Así que asegúrate de hacer deporte en tres días a la semana. Este es uno de los mejores consejos para bajar de peso que realmente funciona.

2. Come pequeñas porciones durante el día

ensalada-frutas

Comer pequeñas porciones de comida durante el día mantendrá el metabolismo más fuerte. Lo mejor que puedes hacer por el cuerpo es comer pequeñas comidas saludables. Podrás perder peso y estar en un mejor estado de ánimo con solo practicar este hábito alimenticio.

3. Desayuna sano

Cuando te levantas por la mañana, el metabolismo es más lento, para ponerlo en marcha lo ideal es comer un desayuno saludable. Sin embargo esta suele ser una comida crítica ya que mucha gente incluye ultraprocesados a primera hora de la mañana.

4. Come una manzana al día

manzanas

¿Conoces el viejo dicho, una manzana al día te mantiene alejado del médico? ¿Podría esto ser cierto? Sí lo es, dado a que las manzanas están cargadas de nutrientes para mejorar la salud, junto con aumentar la tasa metabólica.

Las manzanas también tienen pectina, una fibra que ha demostrado mejorar la biodiversidad de la microbiota. Esto ayuda a generar cambios positivos en la composición corporal.

5. Toma sopa

Según un estudio de la Universidad Penn, consumir sopa antes del plato principal puede ahorrarte hasta 700 calorías a la semana. En este estudio, los sujetos que consumieron la sopa antes de la comida consumieron 100 calorías menos.

Así que adelante y ten un poco de sopa para que puedas bajar de peso y alcanzar sus objetivos.

6. Come más verduras

Brocoli calcio, consejos para bajar de peso

Para obtener un montón de fibra, fitonutrientes y ayudar a lograr los objetivos de pérdida de peso, asegúrate de comer verduras.

Puedes alcanzar tu meta de al menos 6 porciones de verduras al día comiendo 2 ensaladas al día, 2 aperitivos de verdura, añadiendo verduras a tu huevo y tomar un batido o jugo verde. Esta es una manera fácil agregar verduras a tu dieta. Existen evidencias conforme este hábito es capaz de mejorar la salud.

7. Duerme más

Si tienes falta de sueño, la ciencia ha demostrado que tu cuerpo secreta la hormona cortisol, también conocida como la “hormona del estrés”, que aumenta el peso. Dormir pocas horas se relaciona con un mal descanso y con falta de horas de sueño. A pesar de que dicha condición podría disminuir el gasto energético, también es capaz de incrementar notablemente el apetito.

Para evitar este aumento de peso, asegúrate de obtener más horas de sueño. Se recomienda tener entre 6-8 horas de sueño por noche. Ten en cuenta que excederse con el tiempo que se pasa en la cama puede ser también perjudicial. Todo tiene su justa medida.

Los hábitos determinan la pérdida de peso

No solo con estos consejos conseguirás estimular la pérdida de peso. Es necesario que cuides los aspectos de la rutina y que implementes hábitos saludables para conseguir hacer efectiva la mejora de la composición corporal. De este modo podrás reducir el porcentaje graso de forma progresiva.

Si aun realizando cambios no consigues experimentar mejoría, acude al médico. Existen ciertas patologías que pueden lastrar la pérdida de peso, por lo que será necesaria medicación para solventar el problema. No es una situación frecuente, pero puede darse. Un ejemplo sería el hipotiroidismo, un problema hormonal que cursa con una disminución del metabolismo basal y con una situación de cansancio excesivo.

Bajar de peso es posible

Si pones en práctica lo comentado, es muy posible que bajes de peso. Trata siempre de huir de las dietas milagro y de los planes que te ofrecen el camino fácil, pues esto nunca suele resulta efectivo a medio plazo. Ten en cuenta que un error en la elección de la dieta puede generar efectos adversos a nivel de salud, siendo peor el remedio que la enfermedad.

Si tienes dudas sobre que plan dietético es mejor para ti, consulta con un especialista. Este podrá diseñar un menú acorde con las necesidades individuales y con la situación de cada uno, buscando la máxima adherencia posible. Así se incrementarán las probabilidades de éxito y se conseguirá una mejora notable en el estado de salud que repercutirá en la calidad de vida. Ten en cuenta que bajar de peso no es solo una cuestión estética.


No hay que comer de todo

 



¿Cuántas veces has oído lo de “hay que comer de todo pero con moderación”? Y te vas con la conciencia muy tranquila, porque tú eres muy moderada/o. ¿Pero quiere decir que tengo que echar al carro algo de cada pasillo del supermercado para llevar una dieta equilibrada? ¿Y cuánto es eso de moderación? ¿Es lo mismo para una verdura que para un fruto seco?

Como mucha gente no tiene claras las respuestas a esas preguntas, pienso que eso de “comer de todo con moderación” es un consejo peligroso.

Si quieres aprender a distinguir los mejores alimentos de forma fácil y un sencillo método para medir cantidades y saber cuándo parar, sigue leyendo.

Qué comer

Hay productos que no aportan nada bueno (a nivel nutricional), y hay alimentos de los que puedes repetir varias veces al día y ayudarán mucho a tu salud.

Desde la tristemente célebre 
pirámide hasta las recomendaciones actuales, han cambiado muchas cosas.

Quizá los principales avances se podrían resumir en:

– que vegetales y frutas constituyen mejor base que los cereales para una buena alimentación,

– que las grasas son necesarias, y no todas son malas.

Un buen punto de partida y sencillo de interpretar podría ser el plato para comer saludable que propone la universidad de Harvard.

Plato Comer Saludable_Harvard


Como puedes ver, la base de la alimentación deberían ser productos naturales: aquello que nace de la tierra, que corre, nada o vuela.

Un par de apuntes:

Cuando habla de granos, se podrían sustituir por otros alimentos ricos en carbohidratos: patata, yuca, plátano macho, calabaza, boniato

Los aceites no son las únicas fuentes de grasa saludable: frutos secos, aguacate, coco, chocolate puro (>85% de cacao), etc.
Qué evitar

No soy partidario de prohibir. Creo que conlleva un componente psicológico difícil de predecir. Hay personas a las que lo prohibido les llama la atención, les excita y lo acaban viendo como un desafío que deben vencer. A otras, la prohibición les genera angustia y ansiedad. Y en cualquier caso, prohibir limita la libertad.

Lo que sí está claro es que hay ciertos productos cuyo consumo deberías limitar mucho, y mejor aún si los evitas. En este grupo estarían los ultraprocesados, como por ejemplo los cereales de caja (esas donde salen muñecos sonrientes), galletas y bollería industrial, snacks de aperitivo (gusanitos y cosas de esas), refrescos y zumos industriales

¿Cuánto es suficiciente?

La segunda parte que se presta a confusión es “ con moderación”. ¿Qué significa eso? ¿Cuánto es moderación? Es un término muy subjetivo, que cada cual puede interpretar de muchas formas.

¿Cuántas veces has oído lo de “no sé por qué engordo, si yo como muy bien”? Según varios estudios, calculamos bastante mal las cantidades que comemos. Por eso, quiero darte unas sencillas pautas para que puedas controlar mejor.

Puedes hacerte una idea de las porciones recomendadas para cada comida principal (desayuno, almuerzo y cena) usando tu mano como instrumento de medida. Se distingue entre mujeres y hombres, ya que, normalmente, ellas necesitan menor ingesta total que ellos.

Puñados de fresas


 MUJERES:

1-3 puños de vegetales (porción del tamaño de un puño cerrado)

1-2 palmas de alimentos ricos en proteína (porción del tamaño de la palma de la mano)

1 pulgar de alimentos ricos en grasa (porción del tamaño del dedo pulgar)

1 puñado de alimentos ricos en carbohidratos (porción que cabría dentro de tu mano semicerrada)
HOMBRES:

2-3 puños de vegetales (porción del tamaño de un puño cerrado)

2 palmas de alimentos ricos en proteína (porción del tamaño de la palma de la mano)

1-2 pulgares de alimentos ricos en grasa (porción del tamaño del dedo pulgar)

1-2 puñados de alimentos ricos en carbohidratos (porción que cabría dentro de tu mano semicerrada)
Ten en cuenta que lo anterior son estimaciones generales. Aunque son un buen punto de partida, cada persona es un mundo, y requiere cantidades distintas en función de sus particularidades (nivel de actividad física, composición corporal, objetivos, genética, etc.).

Conclusiones

La Nutrición es una ciencia muy joven (comparada con otras), y cada día se hacen nuevos descubrimientos. Eso explica que las recomendaciones oficiales hayan cambiado tanto en los últimos años.

Además, las conclusiones que se obtienen de los estudios funcionan para una mayoría de personas. Pero también sabemos que cada persona reacciona de manera diferente. Por eso hay que distinguir entre:

Recomendaciones oficiales. Deberían ser bastante conservadoras, ya que van dirigidas a la población general y tienen mucha difusión.

Recomendaciones particulares. Cuando un profesional te trata y conoce tu caso específico, puede aplicar otras fórmulas. Pero cuidado: el “a mí me funciona” no significa que le funcione a otra persona, ni es un criterio válido para dar consejos.
Afortunadamente, hay un principio muy sencillo sobre el que existe poca discusión: la base de tu alimentación deben ser productos naturales (vegetales, proteína –pescado, marisco, pollo, huevos, carne-, frutas, tubérculos, frutos secos).

No es cuestión de ponerse a dieta, sino de hábitos saludables. Cocina, experimenta con sabores y encuentra la manera que mejor te resulte más sencilla para que cada semana te alimentes un poquito mejor.