22 marzo 2022
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20 marzo 2022
8 remedios naturales para limpiar el intestino
Un intestino sano es el requisito previo para un sistema inmunitario fuerte. Un intestino sano puede prevenir enfermedades agudas y crónicas. Con el estrés, la falta de tiempo y la alimentación irregular y poco sana, muy pocas personas tienen la suerte de tener un intestino en forma.
Con medios simples y al mismo tiempo económicos, puedes volver a poner tus intestinos en forma. Te ayudarán a calmar la mucosa intestinal, a regular el peristaltismo intestinal e influirán positivamente en la microbiota digestiva.
OCHO REMEDIOS CASEROS PARA LA HIGIENE INTESTINAL
1. LINAZA
La linaza (semillas de lino es un remedio casero muy económico para la limpieza del colon. Incluso comprando una linaza con la mejor calidad ecológica, no pagarás más de 6 euros por un kilogramo (normalmente bastante menos) y solo necesitarás unos pocos gramos al día.
La linaza se toma con abundante agua y al rato forma una masa mucilaginosa que protege las mucosas digestivas. Al mismo tiempo, estimula el peristaltismo, lo que conduce a una excreción regular de heces.
La mejor manera de tomarla es triturando las semillas y mezclándolas con agua u otra bebida saludable. Si se tomaran las semillas enteras, el sistema digestivo no sería capaz de triturarlas y sacar todos sus nutrientes: los ácidos grasos omega-3 con propiedades antiinflamatorias, las vitaminas del grupo B, las proteínas o los lignanos que regulan el sistema endocrino.
2. POLVO DE CÁSCARA DE PSYLLIUM
El polvo de cáscara de psyllium es incluso más eficaz que la linaza. Es una fibra dietética que se une a las toxinas en el intestino y crea un entorno saludable para las bacterias intestinales beneficiosas. Al igual que la linaza, forma un gel antiinflamatorio.
El polvo de cáscara de psyllium es muy económico. Una bolsa de 300 g cuesta alrededor de 15 euros y con un uso diario de un máximo de 10 g es suficiente para una cura de cuatro semanas. Incluso la mitad de la cantidad ya es efectiva, por lo que una dosis diaria no llega a 50 céntimos.
Es absolutamente importante beber mucha agua al tomar el polvo, preferiblemente 400 ml por 5 a 10 g. Para hacer esto, el polvo se mezcla con un poco de agua (por ejemplo, en 100 ml) y se bebe rápidamente. Bebe los 300 ml restantes lentamente.
3. BENTONITA Y ZEOLITA
La bentonita y la zeolita se encuentran entre las tierras minerales curativas. Absorben toxinas en el intestino y dejan un ambiente agradable para la flora intestinal. La mucosa intestinal puede curarse mejor con su uso y la inflamación disminuye.
Ambas tierras regulan la actividad intestinal de tal manera que pueden ser útiles tanto para la diarrea como para el estreñimiento. También se usan internamente para dolores de cabeza, indigestión, resacas e intoxicaciones y externamente para eczemas, abscesos y picaduras de insectos.
Una lata de zeolita puede rondar los 20 euros, lo que significa que con una dosis diaria (dos veces 1,25 g) solo gastas 40 céntimos al día.
Utiliza únicamente zeolita que esté etiquetada como medicamento y tenga un tamaño medio de grano de 10 µm. Este tamaño es lo suficientemente grande para evitar que las partículas de zeolita sean absorbidas por el torrente sanguíneo, pero también lo suficientemente pequeño para lograr la mayor absorción posible de sustancias indeseables.
4. AGUA
El agua está seriamente subestimada, porque es un remedio excelente y, por supuesto, extremadamente económico para limpiar los intestinos y para la promoción general de los procesos de desintoxicación propios del cuerpo.
Bebe agua regularmente porque mantiene un buen flujo de sangre, es imprescindible para la digestión y asimilación de nutrientes, elimina las toxinas del cuerpo, apoya la función renal y, por lo tanto, también la eliminación de contaminantes con la orina.
5. ENEMAS INTESTINALES
Un enema intestinal es muy fácil de realizar y extremadamente efectivo. Los enemas son también uno de los medios más baratos de limpieza de colon. Además, la irrigación colónica es una excelente medida de primeros auxilios para el estreñimiento persistente, pero también para dolores de cabeza y malestar general.
Un kit de enema está disponible en farmacias desde 12 euros y te durará toda la vida.
6. MASAJES ABDOMINALES
Los masajes abdominales son probablemente el medio más económico para la limpieza del colon, una simple medida de autoayuda para la que no se necesita un médico y que cualquiera puede realizar por sí mismo con casi cualquier condición de salud.
Los masajes abdominales no te costarán más que un poco de su tiempo (10 minutos), pero son extremadamente efectivos. Relaja los intestinos, promueve la circulación sanguínea (y por lo tanto el suministro de oxígeno y nutrientes a todos los órganos abdominales) y activa el peristaltismo digestivo.
El resultado es impresionante, las flatulencias desaparecen, se elimina el estreñimiento, incluso mejoran los dolores de espalda y las hemorroides.
7. CHUCRUT Y KIMCHI
El chucrut y el kimchi son dos alimentos probióticos, lo que significa que contienen cepas beneficiosas de bacterias que también son nativas de un intestino sano. Al mismo tiempo, contienen ácido láctico, lo que asegura un ambiente óptimo en el intestino.
A la hora de comprar chucrut, busca en supermercados ecológicos o tiendas de fermentación para evitar los productos pasteurizados que ya no contienen bacterias vivas.
8. JENGIBRE
El jengibre es también uno remedios económico para la limpieza del colon. Puedes usar la raíz cortada, molida, en forma de gotas o en forma de cápsula.
El jengibre tiene un efecto curativo en todo el sistema digestivo, desde la garganta, donde elimina el mal aliento, hasta el estómago, donde activa los jugos digestivos, o el intestino, donde reduce la hinchazón, los calambres y la inflamación.
El extracto líquido de jengibre es fácil de usar. Agrega 3 gotas al agua o a una infusión todos los días para lograr un efecto concentrado.
Frutas que calman tu antojo de dulces
Muchas veces el antojo de dulce te hace lanzarte a opciones poco sanas como puede ser el chocolate o los helados. Aprovecha el verano para calmar esa ansia con fruta, que ademas te ofrecerá muchos beneficios añadidos.
Si deseas algo dulce en verano, déjate de refrescos y helados comerciales cargados de grasas insanas y azúcares. Elige sin dudarlo frutas frescas de temporada, pues son la alternativa más saludable, rica en vitaminas, minerales y fibra.
CON LAS FRUTAS TE REFRESCAS, CONSIGUES VITAMINAS Y AHORRAS CALORÍAS CON LAS FRUTAS
1. FRESAS
Si eliges fresas, por ejemplo verás que tienen muchas vitaminas y minerales: 100 gramos de estas deliciosas frutas rojas contienen más vitamina C que los limones o las naranjas.
También contienen ácido fólico, vitamina B1 y vitamina K. Además de minerales como zinc, cobre y manganeso.
Otro punto a su favor es que a pesar de su sabor dulce, estas deliciosas frutas son bajas en azúcar, con alrededor de 32 kilocalorías por cada 100 gramos.
Las fresas también contienen fitoquímicos antiinflamatorios y antioxidantes muy beneficiosos, pues ayudan a prevenir enfermedades cardiovasculares y ciertos tipos de cáncer.
Además tienen efecto depurativo pues sus ácidos orgánicos favorecen la función del hígado.
2. ARÁNDANOS
Los arándanos también son bajos en azúcar y tienen una cantidad comparativamente alta de vitamina E y manganeso.
Su alto contenido en antocianinas asegura que estas frutas protegen las células y reducen el estrés en el organismo humano.
Están especialmente indicados para prevenir las infecciones urinarias, pues impiden que las bacterias se fijen y se multipliquen en las vías de eliminación.
Si no los encuentras frescos, una buena opción y a menudo más barata es comprarlos congelados y preparar con ellos granizados y helados caseros.
3. GROSELLAS
Las grosellas, como las fresas, son una muy buena fuente de vitamina C. Esto es especialmente cierto en el caso de las grosellas negras, que contienen nada menos que 170 mg de vitamina C por cada 100 gramos 5.
4. SANDÍA Y MELÓN
La sandía solo tienen 37 kilocalorías por 100 gramos. La misma cantidad de melón tiene 54 kilocalorías. Son, por tanto, frutas muy poco calóricas.
Pero no es solo la cantidad comparativamente baja de calorías hace que comer melones y sandías sea muy sano. Los melones, por ejemplo, tienen un contenido significativo de vitamina C y las sandías contienen fitoquímicos antioxidantes como el licopeno.
Además tanto las sandías como los melones son un calmante ideal para la sed, porque contienen hasta un 95% de agua.
5. CEREZAS
Las cerezas también son un tentempié ideal entre comidas. Contienen minerales como hierro, potasio, calcio y magnesio.
Entre sus vitaminas destacan la C (15 mg/100 g), el ácido fólico (14 mcg), el betacaroteno o provitamina A y las vitaminas B1 y B6.
Además son ricas en antocianinas y ácido elágico, poderosos antioxidantes.
6. MELOCOTONES
Todas las variedades de melocotón son deliciosas, pero el melocotón de agua es exquisito y superhidratante. Es además un gran aliado de la piel, gracias a su riqueza en betacaroteno o provitamina A (490 UI), vitamina C (10 mg) y vitamina E (1,1 mg).
El melocotón es diurético y contribuye a combatir el problema de la retención de líquidos, más frecuente en verano.
7. PERA LIMONERA
Esta variedad, que procede de Francia, tiene una pulpa blanca, granulosa, jugosa y muy dulce, pero es tan baja en calorías y tan rica en fibra que es apta para diabéticos.
La piel es muy fina, está moteada y se torna amarilla cuando madura. Es astringente, se considera una de las frutas más adecuadas para detener las diarreas.
También está indicada para hipertensos por su riqueza en potasio.
LA FRUTA ES SANA, PERO NO TE PASES
Hay otros tipos de frutas que puede y debes disfrutar, pero con moderación, porque tienen un alto contenido en azúcar. Entre ellas se encuentran por ejemplo el plátano y las uvas.
Lo ideal es una mezcla de frutas y verduras como pepinos, rábanos, pimientos o apios. Las verduras refuerzan las propiedades antioxidantes, aportan fibra y no suman azúcares.