16 enero 2024

: qué son y cómo consumir la cantidad recomendada




El ácido eicosapentaenoico (EPA) y el ácido docosahexaenoico (DHA) son omega-3, un tipo de ácidos grasos poliinsaturados con múltiples y comprobados beneficios para la salud, en especial para el corazón y el cerebro.

Aunque la principal fuente de estas grasas saludables es el pescado, también están presentes en alimentos de origen vegetal como las algas, pueden obtenerse a partir de la síntesis del ácido alfa-linolénico (ALA) o, en caso de ser necesario, de suplementos nutricionales.

¿QUÉ ES EL EPA Y PARA QUÉ SIRVE?

El ácido eicosapentaenoico (EPA) es un tipo de omega-3 conocido por sus beneficios para la salud cardiovascular, en especial en la reducción de los triglicéridos en sangre y la presión arterial.

Se le atribuyen efectos antiinflamatorios y se cree que ayuda a que el sistema inmunitario funcione bien. Asimismo, es clave para cerebro porque participa en el mantenimiento de la estructura y la función de las membranas celulares del cerebro.

El EPA también es importante en el desarrollo de los fetos y se suele recomendar a las mujeres embarazadas que se aseguren de consumir la cantidad diaria recomendada.


Además, diversos estudios sugieren que puede ayudar a reducir el dolor y la rigidez de las articulaciones, con lo que puede ser beneficioso en enfermedades como la artritis reumatoide.

El EPA se encuentra principalmente en pescados de agua fría, particularmente en pescados grasos como el salmón, la caballa, el atún y las sardinas, así como el marisco. También está presente en alguna

¿QUÉ ES EL DHA Y PARA QUÉ SIRVE?

El ácido docosahexaenoico (DHA) es otro omega-3 que resulta especialmente importante para el buen funcionamiento cerebral y de los ojos, pues es un componente de los fosfolípidos que forman las membranas celulares, especialmente en el cerebro y la retina.

Igual que sucede con el EPA, desempeña un papel crucial durante el embarazo y también en la infancia porque participa en el desarrollo del cerebro, la visión y el sistema nervioso del bebé.

También tiene propiedades antiinflamatorias y se cree que puede ser beneficioso para la salud cardiovascular, al reducir los niveles de triglicéridos en sangre, mejorar la función de los vasos sanguíneos y reducir la presión arterial.

El DHA, como el EPA, se encuentra en el pescado graso de agua fría, algunos tipos de algas y en suplementos nutricionales.

DIFERENCIAS ENTRE EPA Y DHA

Si bien ambos son ácidos grasos omega-3 de cadena larga con beneficios para la salud, su estructura química es diferente: el EPA tiene 20 átomos de carbono y 5 dobles enlaces y el DHA tiene 22 átomos de carbono y 6 dobles enlaces.

También sus funciones y beneficios específicos son diferentes: mientras que el EPA es más conocido por sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes y el cuidado de la salud cardiovascular, el DHA es crucial para la función cerebral y la salud ocular.

CANTIDAD DIARIA RECOMENDADA DE EPA Y DHA

La cantidad de EPA y DHA recomendada al día varía en función de diversos aspectos como la edad o el estado de salud. No obstante, en los adultos sanos se suele recomendar un mínimo de 250 a 500 mg combinados de EPA y DHA al día.

Estas recomendaciones aumentan en caso de personas con enfermedades cardiacas: en este caso, la Asociación Americana del Corazón (AHA) recomienda hasta 1 g al día de EPA más DHA, preferiblemente procedente del pescado azul.

Por otro lado, nuestro cuerpo puede producir ácidos EPA y DHA a partir del ácido alfa-linolénico (ALA), un ácido graso omega-3 esencial (es decir, que solo se puede obtener a través de los alimentos) que se encuentra en algunas fuentes vegetales, como las semillas de lino o de chía, las nueces o algunos aceites vegetales. Sin embargo, esta conversión es bastante limitada y depende de cada persona.

De acuerdo con la Federación Española de Sociedades de Nutrición, Alimentación y Dietética (FESNAD) la ingesta recomendada diaria de ALA de entre 1,1 y 1,6 g.

SUPLEMENTOS DE EPA Y DHA: CÓMO TOMARLOS

El EPA y el DHA, como hemos comentado, se encuentran principalmente en el pescado graso de agua fría (salmón, atún, caballa, sardina…), algunos mariscos y algas; y se pueden obtener también a través de la conversión del ALA.

Aunque suele recomendarse la obtención de estos ácidos grasos directamente a través de la dieta, también se pueden obtener a partir de la suplementación.

Existen diversos suplementos de EPA y DHA provenientes de pescado o, si se sigue una alimentación vegetariana o vegana, de algas. Pueden encontrarse combinaciones de EPA y DHA o los dos ácidos grasos por separado.

Conviene siempre consultar a un especialista la conveniencia de la suplementación y la dosis recomendable en cada caso.

Cuerpomente

15 enero 2024

Una taza al día de este té ayuda a reducir la respuesta glucémica y disminuir la taza de diabetes y si fuera poco, protege al páncreas


Más allá de su capacidad para despertarnos por la mañana, el té negro ha demostrado ser una herramienta valiosa en la lucha contra la diabetes y la protección del páncreas.

En este artículo, exploraremos en profundidad cómo una simple taza al día de este elixir oscuro puede tener un impacto significativo en tu salud y bienestar.

Prepárate para descubrir los beneficios ocultos del té negro y las recomendaciones prácticas para incorporarlo a tu rutina diaria.

El té negro y su poder en la respuesta glucémica

La diabetes, una enfermedad que afecta a millones de personas en todo el mundo, se caracteriza por niveles elevados de azúcar en la sangre.

Uno de los desafíos principales para quienes la padecen es controlar estos niveles para prevenir complicaciones graves. Aquí es donde entra en juego el té negro.

Un estudio publicado en la revista «The Journal of Food Science» reveló que el té negro puede ayudar a reducir la respuesta glucémica, es decir, la velocidad a la que los alimentos aumentan los niveles de azúcar en la sangre.

Esto se debe en gran parte a los polifenoles que se encuentran en el té negro, especialmente las catequinas. Estas sustancias tienen la capacidad de ralentizar la digestión y absorción de los carbohidratos, lo que evita picos de azúcar en la sangre después de las comidas.

Protegiendo el páncreas: El papel clave del té negro

El páncreas, un órgano vital para la regulación del azúcar en la sangre, desempeña un papel crucial en la diabetes. Cuando las células pancreáticas se dañan o no funcionan correctamente, se produce una deficiencia en la producción de insulina, la hormona que regula los niveles de azúcar en la sangre. Aquí es donde el té negro demuestra ser aún más impresionante.

El té negro contiene flavonoides, como la quercetina y el kaempferol, que han demostrado tener propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Estos compuestos pueden proteger las células del páncreas contra el estrés oxidativo y la inflamación, factores que pueden contribuir al desarrollo de la diabetes tipo 2.

Además, algunos estudios sugieren que el té negro puede estimular la regeneración de células pancreáticas dañadas, lo que podría ser un avance significativo en el tratamiento de la enfermedad.

¿Cómo incorporar el té negro a tu vida diaria?

Ahora que conoces los beneficios del té negro en la lucha contra la diabetes y la protección del páncreas, es hora de descubrir cómo puedes disfrutar de esta bebida de manera efectiva. Aquí tienes algunas recomendaciones originales y prácticas:

1. Té negro con especias

Añadir un toque de especias como la canela, el clavo de olor o el jengibre a tu taza de té negro puede mejorar su sabor y sus beneficios para la salud. Estas especias también se han asociado con la regulación de los niveles de azúcar en la sangre, lo que potenciará los efectos positivos del té negro.

2. Té helado con limón

Preparar té negro helado y añadir unas rodajas de limón fresco puede ser una manera refrescante de disfrutar de esta bebida en los días calurosos. El limón no solo aporta sabor, sino que también proporciona vitamina C, que es conocida por su capacidad para mejorar la salud del sistema inmunológico.

3. Té negro en tus recetas

El té negro también se puede incorporar en la cocina. Puedes utilizarlo como base para salsas, marinados o incluso en la preparación de postres como pasteles y galletas. Esto añadirá un sabor único y saludable a tus comidas.

4. Variación de hojas sueltas

Si deseas experimentar con diferentes tipos de té negro, considera probar variedades de hojas sueltas en lugar de bolsitas de té. Las hojas sueltas suelen tener un sabor más completo y una mayor concentración de antioxidantes.

El té negro, un aliado poderoso

El té negro no es solo una bebida reconfortante, sino un aliado poderoso en la prevención y el manejo de la diabetes, así como en la protección del páncreas.

Al incorporar una taza al día de esta infusión en tu rutina, puedes disfrutar de sus beneficios para la salud y su delicioso sabor.

Además, al experimentar con diferentes preparaciones y recetas, puedes agregar variedad a tu consumo de té negro y mantener tu paladar emocionado.

Así que, la próxima vez que te sientes a disfrutar de una taza de té negro, recuerda que no solo estás satisfaciendo tus papilas gustativas, sino también brindando a tu cuerpo una valiosa herramienta en la lucha contra la diabetes y la protección del páncreas. ¡Salud y té negro para una vida más saludable y sabrosa!

Cómo una dieta rica en omega-3 puede prevenir la degeneración macular

 


La degeneración macular relacionada con la edad (DMAE) es una de las principales causas de pérdida de visión en personas mayores de 50 años. A medida que la población envejece, la prevención de esta condición se ha vuelto cada vez más importante.

En este contexto, la dieta juega un papel crucial, y recientes estudios han destacado el potencial de los ácidos grasos omega-3 para prevenir la progresión de la DMAE.

Este artículo profundiza en cómo una dieta rica en omega-3 puede ser beneficiosa para la salud ocular y la prevención de la degeneración macular.

El papel de los omega-3 en la salud ocular

Los ácidos grasos omega-3, especialmente el DHA (ácido docosahexaenoico) y el EPA (ácido eicosapentaenoico), son componentes clave de la retina, la parte del ojo responsable de la visión central.

La DMAE es una condición en la que la parte central de la retina (la mácula) se deteriora con el tiempo, afectando la visión central. Los omega-3 pueden ayudar a prevenir la progresión de la DMAE de varias maneras:

  1. Reducción de la inflamación: Los omega-3 tienen potentes propiedades antiinflamatorias que pueden reducir el riesgo de inflamación en la retina, una causa contribuyente a la DMAE.
  2. Protección contra el daño de los radicales libres: El DHA y el EPA ayudan a proteger las células de la retina del daño oxidativo causado por los radicales libres, un factor conocido en el desarrollo de la DMAE.
  3. Mejora de la circulación sanguínea: Una buena circulación sanguínea es vital para la salud ocular, y los omega-3 pueden mejorar el flujo sanguíneo hacia la retina.

Fuentes de omega-3

Incorporar alimentos ricos en omega-3 en la dieta es una estrategia efectiva para aumentar la ingesta de estos ácidos grasos esenciales. Algunas de las mejores fuentes incluyen:

  • Pescado graso: Salmón, caballa, sardinas y atún son excelentes fuentes de omega-3.
  • Semillas y nueces: Las semillas de chía, las semillas de lino y las nueces también son ricas en omega-3.
  • Aceites vegetales: El aceite de linaza y el aceite de canola contienen altos niveles de omega-3.

Consideraciones dietéticas adicionales

Además de los omega-3, otros nutrientes son importantes para la salud ocular. Estos incluyen la luteína y la zeaxantina, dos antioxidantes que se encuentran en verduras de hojas verdes, y las vitaminas C y E, que también tienen propiedades antioxidantes

Una dieta rica en omega-3 puede ser un componente clave en la prevención de la degeneración macular relacionada con la edad. Al incluir regularmente

fuentes de omega-3 en la dieta y prestar atención a otros nutrientes esenciales para la salud ocular, se puede reducir significativamente el riesgo de DMAE y mantener una buena visión en la vejez.

Si bien la dieta por sí sola no puede prevenir completamente la degeneración macular, es una parte integral de un enfoque de estilo de vida para preservar la salud ocular.

Es recomendable consultar con un profesional de la salud o un nutricionista para diseñar una dieta que atienda las necesidades específicas de cada individuo, especialmente en casos de riesgo elevado de DMAE.

En última instancia, una dieta equilibrada, rica en nutrientes esenciales, no solo beneficia la salud de los ojos, sino que también contribuye al bienestar general y la calidad de vida.

La relación entre la exposición al sol y la prevención de la osteoporosis





La osteoporosis, una enfermedad caracterizada por la disminución de la densidad ósea y un aumento en el riesgo de fracturas, es una preocupación creciente de salud pública, especialmente en poblaciones envejecientes

Mientras que los factores como la genética y la dieta juegan un papel crucial en su desarrollo, un aspecto que a menudo se pasa por alto es el papel de la exposición solar en la prevención de esta condición.

Este artículo examina cómo la exposición moderada y segura al sol puede ser un factor significativo en la lucha contra la osteoporosis, explorando la conexión entre la vitamina D, la salud ósea y los rayos solares.

Vitamina D: el vínculo entre el sol y los huesos fuertes

La vitamina D es esencial para la salud ósea. Ayuda al cuerpo a absorber el calcio, que es el bloque de construcción principal de los huesos.

Una de las fuentes naturales más eficaces de vitamina D es la exposición a la luz solar. Cuando la piel está expuesta a los rayos UVB del sol, inicia un proceso que produce vitamina D.

¿Cómo ayuda la vitamina D a prevenir la osteoporosis?

  1. Mejora de la absorción de calcio: La vitamina D facilita la absorción de calcio en el intestino, lo que es fundamental para el desarrollo y mantenimiento de huesos fuertes.
  2. Regulación del metabolismo óseo: La vitamina D juega un papel clave en la regulación del metabolismo óseo y en la renovación de los huesos, procesos esenciales para prevenir la osteoporosis.



La exposición solar adecuada: encontrando el equilibrio

Mientras que la exposición al sol es una fuente efectiva de vitamina D, también es importante encontrar un equilibrio para evitar los riesgos asociados con la sobreexposición solar, como el cáncer de piel

Los expertos recomiendan una exposición moderada – generalmente alrededor de 5 a 15 minutos, varias veces a la semana, dependiendo de la ubicación geográfica, el tono de piel y la sensibilidad al sol.

Desafíos y consideraciones en la obtención de vitamina D solar

  • Ubicación geográfica y estacionalidad: Las personas que viven en latitudes más altas o en lugares con menos días soleados pueden tener dificultades para obtener suficiente vitamina D del sol.
  • Uso de protector solar y cobertura del cuerpo: El uso de protector solar y la ropa que cubre la mayor parte del cuerpo pueden reducir la capacidad de la piel para producir vitamina D.

Fuentes alternativas de vitamina D

Para aquellos que no pueden obtener suficiente vitamina D a través de la exposición solar, existen otras opciones

  • Suplementos de vitamina D: Pueden ser una alternativa eficaz, especialmente para personas en riesgos de deficiencia.
  • Alimentos ricos en vitamina D: Incluir en la dieta alimentos como pescado graso, yemas de huevo y alimentos fortificados puede ayudar a aumentar los niveles de vitamina D.

Conclusión

La relación entre la exposición al sol y la prevención de la osteoporosis destaca la importancia de la vitamina D en la salud ósea. Una exposición solar moderada y segura, complementada con una dieta rica en vitamina D o suplementos cuando sea necesario, puede ser una estrategia efectiva para prevenir la osteoporosis.

Es importante, sin embargo, equilibrar los beneficios de la vitamina D con la necesidad de proteger la piel del daño solar.

Consultar con un profesional de la salud para determinar la mejor estrategia de prevención de la osteoporosis, teniendo en cuenta las necesidades individuales y el estilo de vida, es siempre recomendable.

Equipo editorial