28 marzo 2022

Selenio: propiedades y cómo beneficia las defensas

El selenio es un mineral esencial que se obtiene a través de la dieta, y aunque las necesidades diarias de este oligoelemento son pequeñas es necesario cubrirlas, ya que es un poderoso antioxidante con numerosas funciones orgánicas.

Se encuentra presente en muchos alimentos, pero los suelos de cultivo de Europa se han ido empobreciendo de selenio en el paso de los últimos siglos, y algunos vegetales son parcos en este mineral. Por eso una parte de la población puede no llegar a cubrir los requerimientos mínimos.

En este artículo te contamos por qué el selenio es importante para la inmunidad y cómo obtener la dosis justa de este mineral.

PARA QUÉ SIRVE EL SELENIO Y CÓMO AYUDA A TUS DEFENSAS

El organismo acumula unos 20 mcg de selenio, tanto en los músculos como en la glándula tiroides. Su función más destacable es la producción de enzimas antioxidantes que refuerzan las propiedades de las vitaminas C y E, fortaleciendo el sistema inmunitario.

Además de ser antioxidante, ayuda a la proliferación y buen funcionamiento de los glóbulos blancos, y es clave para que actúe el glutatión peroxidasa. Esta enzima favorece la detoxificación y amplía la acción antioxidante de la vitamina C.

Su consumo habitual, además, podría prevenir la aparición de ciertos cánceres, reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares y el deterioro cognitivo.

Además participa en la síntesis de hormonas tiroideas, que fomentan la producción de esperma y el equilibrio del sistema nervioso.

Finalmente, mejora el trabajo del hígado y el páncreas en la digestión y la producción de insulina.

ALIMENTOS QUE CONTIENEN SELENIO

El organismo no es capaz de producirlo, así que la dieta es clave a la hora de garantizar al organismo la cantidad diaria que necesita.

Tiene que incluir las principales fuentes vegetales de selenio, como los cereales integrales, los frutos secos, las semillas y las legumbres. Destacan entre todos las nueces de Brasil, sustancialmente indicadas para las personas intolerantes al gluten o que toman una dieta sin trigo, que es otra de las fuentes más características.

Una nuez de Brasil proporciona unos 70 mcg, y no se aconsejan más de tres al día. Le siguen las pipas de girasol, el germen de trigo, las nueces, el sésamo, el coco, la avena, el arroz, la levadura de cerveza, las setas, las judías y el ajo.


CUÁNTO SELENIO SE NECESITA

Para adolescentes y adultos se habla de 55 mcg al día, pero estos valores se están revisando al alza y en países como Alemania ya aconsejan 70 mcg. Las mujeres embarazadas necesitan 5 mcg extra y las lactantes, 15. En la infancia se precisan 20 mcg diarios hasta los 3 años y 40 mcg hasta los 14.

EFECTOS DE LA CARENCIA DE SELENIO

Puede causar alteraciones en la glándula tiroides, infecciones frecuentes, confusión mental, ansiedad, depresión y debilidad muscular. En casos severos puede afectar al corazón, la fertilidad masculina y la artritis.

Una caída rápida y uniforme de cabello, acompañada de unas uñas quebradizas y con medias lunas demasiado blancas o una piel mortecina, pueden alertar de una carencia. La salud de piel, uñas y pelo reflejan el equilibrio de selenio en el cuerpo.

¿CÓMO SE PUEDE CONFIRMAR QUE EXISTE UNA CARENCIA?

Generalmente, no se establece la medida de selenio en los análisis de sangre habituales, a no ser que se solicite. Si se cree que puede haber un déficit, se puede solicitar un análisis de orina. Los de cabello y uñas se consideran poco fiables.

¿ES ACONSEJABLE TOMAR SUPLEMENTOS?

Los estudios no determinan que la suplementación sea conveniente ni determinante. Se aconseja solo si se ha demostrado una carencia grave y bajo supervisión médica. Hasta 200-300 mcg es la cantidad recomendada, y la mejor forma es la selenometionina.

¿UN EXCESO PUEDE SER PERJUDICIAL?

La seleniosis o intoxicación ocasional con selenio causa trastornos leves: aliento a ajo, náuseas, diarrea, erupciones, sabor metálico... Pero si el exceso es por una errónea suplementación puede derivar en problemas del sistema nervioso, dificultad respiratoria, fallos renales e insuficiencia cardiaca.

6 propiedades del ginkgo biloba, el árbol de la longevidad

 

El ginkgo es una de las plantas más destacadas de la medicina china y también una de las más estudiadas por la ciencia. Descubre las propiedades y beneficios del ginkgo biloca

El ginkgo biloba es el único árbol de su especie –los ginkgoales– que no se ha extinguido y se considera un auténtico fósil viviente, pues su aparición se remonta 250 millones de años. No es extraño que la medicina tradicional china lo considere el árbol de la longevidad.

¿Para qué sirve el ginkgo biloba? Sus propiedades medicinales son investigadas por la ciencia actual, que ha determinado una variedad de indicaciones.

1. MEJORA LA CIRCULACIÓN SANGUÍNEA

En la medicina tradicional china, el ginkgo se usa para "abrir los canales de energía" a diferentes sistemas y órganos, incluidos los riñones, el hígado, el cerebro y los pulmones. De manera coherente, los científicos han descubierto que es capaz de dilatar los vasos sanguíneos y mejorar la llegada de la sangre a todos los tejidos del cuerpo.

Estudios realizados con personas mayores y con pacientes de enfermedades cardíacas revelaron que la complementación con ginkgo aumenta el flujo sanguíneo debido al incremento (hasta un 12%) en los niveles circulantes de óxido nítrico, un compuesto que ensancha los vasos sanguíneos.

Investigaciones adicionales también apuntan a los efectos protectores del ginkgo sobre la salud del corazón, la salud del cerebro y la prevención de accidentes cerebrovasculares.

Dado el efecto del ginkgo sobre la circulación no se debe combinar con fármacos que actúen sobre la coagulación sanguínea.

2. MEJORA EL FUNCIONAMIENTO DEL CEREBRO

Algunos estudios muestran que el ginkgo podría aumentar el rendimiento intelectual y el bienestar percibido. En concreto, podría mejorar la memoria, la concentración y la capacidad de atención.

Un estudio concluyó que en dosis de 480 mg diarios puede reducir la ansiedad, sobre todo en personas mayores.

3. ES BENEFICIOSO PARA LOS OJOS

El ginkgo puede proteger frente al desarrollo del glaucoma y la degeneración macular, que es la principal causa de ceguera en adultos, según una revisión de estudios. Algunas personas pueden incluso mejorar su visión.

Los buenos resulados observados en los estudios pueden estar relacionados con el aumento del flujo sanguíneo que llega a los ojos.

4. PUEDE COMBATIR EL DOLOR DE CABEZA

La cefalea es una de las principales indicaciones del ginkgo en la medicina china. Ayuda sobre todo en los casos de dolor de cabeza y migraña causadas por un excesivo estrés. En este caso, además del efecto circulatorio, los investigadores señalan que los beneficios pueden ser debidos a la acción de los compuestos antioxidantes presentes en el ginkgo.

Por el contrario, algunas migrañas son provocadas por la dilatación excesiva de los vasos sanguíneos. En esta situación, el ginkgo puede tener poco o ningún efecto. Sin embargo, el ginkgo es ineficaz e incluso puede estar contraindicado cuando el dolor de cabeza es causado por la dilatación excesiva de los vasos sanguíneos.

5. MEJORA EL ESTADO DE LAS VÍAS RESPIRATORIAS

Las propiedades antiinflamatorias del ginkgo pueden reducir la afectación de las vías respiratorias y los pulmones. Puede ayudar a prevenir y reducir la intensidad de las crisis asmáticas y disminuir la tos en las de las bronquitis crónicas.

6. DISMINUYE LAS MOLESTIAS DEL SÍNDROME PREMENSTRUAL

Un estudio publicado en el Journal of Alternative and Complementary Medicine señala que reduce un 23% las molestias en jóvenes estudiantes. Curiosamente la mejoría se produjo tanto en los síntomas físicos como en los psicológicos.

5 plantas que previenen los efectos de la alergia al polen

Se calcula que hoy uno de cada cinco españoles son alérgicos al polen y que la cifra va en aumento.

ALERGIA AL POLEN EN 2022

La sequía y las altas temperaturas con las que se inició el 2022 y los elevados niveles de contaminación que se han registrado, que provoca una gran concentración de partículas nocivas en el aire, hacen prever una primavera complicada para los alérgicos al polen.

Se espera que los síntomas de los alérgicos aumenten y que se agudicen los problemas respiratorios en asmáticos.

Durante estas semanas muchas personas se pasan el día pañuelo en mano, estornudando a cada instante.

Podría parecer que en el campo, al estar rodeados de vegetación casi por doquier, es donde la alergia por polinosis es más frecuente, pero según la Sociedad Española de Alergología un 82% de los alérgicos proceden de zonas urbanas.

Al polen de ciertas plantas que medran en nuestras calles, se suma en este caso la contaminación atmosférica.

Recientemente, la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) ha alertado de que que cada vez hay más evidencia científica que apoya los efectos nocivos de la contaminación del medio ambiente en la salud respiratoria.


Árboles que tienen en el viento el vehículo de dispersión de su polen –fresnos, olmos, álamos, olivos y cipreses– son responsables de un buen número de alergias.

Las gramíneas causan alergias tanto en ambientes rurales como en ciudades. También son muy alergénicas las plantas oportunistas que aparecen en aceras, tiestos y parterres, como parietarias, cenizos, ortigas y amarantos.

TRATAMIENTOS NATURALES CONTRA LA ALERGIA

Cada año, cuando llega la primavera, una parte notable de la población se asoma a la ventana con la incertidumbre de si volverá a verse afectada por los efectos fastidiosos, y algunas veces imposibilitantes, de las alergias.

Según la Sociedad Española de Alergología, unos ocho millones de españoles son alérgicos al polen de las plantas. Gramíneas, urticáceas, artemisas, cipreses, plátanos, chopos y olivos se consideran los máximos responsables de este tipo de alergias.

Los tratamientos convencionales comprenden:

  • medicamentos antihistamínicos, que se encargan de bloquear los receptores de histamina y anular así sus efectos nocivos;
  • los corticoides de síntesis, que complementan la acción de estas hormonas, prescritas por su acción antiinflamatoria en caso de hinchazón y enrojecimiento de las mucosas;
  • los esteroides nasales, que se aplican sobre las fosas nasales,
  • y las vacunas.

Las plantas medicinales, con efectos antialergénicos y antiinflamatorios, pueden ser una ayuda complementaria y, en muchos casos, una buena alternativa a la agresividad de ciertos fármacos.

En procesos alérgicos agudos hay que consultar al médico antes de usar estas plantas, sobre todo si se sigue algún tratamiento clínico.

PLANTAS PARA PIEL Y MUCOSAS

De las propias plantas puede surgir la solución, o cuando menos un apoyo para dulcificar sus molestos efectos.

Una de ellas es la perpetua, que aplicada en infusión o colirio, resulta ideal para rebajar la inflamación de la conjuntiva del ojo y de la mucosa nasal, detener el lagrimeo y aliviar algo los estornudos explosivos y los arranques de tos.

A modo preventivo, los herboristas proponen una planta china que está ganando muchos adeptos y que se ha mostrado muy eficaz para fortalecer las defensas. Es el Huang Qi o astrágalo chino, un adaptógeno que ayuda a blindarse de las infecciones ambientales y que, tomado en las semanas previas al inicio de la primavera, puede reducir los síntomas.

Otro antialérgico natural es el gordolobo, muy adecuado para combatir los ataques de tos, la irritación constante de garganta y la conjuntivitis, así como para aliviar los sarpullidos, picores, granos o urticarias que en muchos casos acompañan a la polinosis.

Para uso externo, un buen antihistamínico es el árnica, acaso el más eficaz para combatir urticarias y picores persistentes.

El gordolobo ayuda a despejar las vías respiratorias y calma los picores de la piel. El árnica se emplea a menudo en pomadas para aliviar las urticarias y como remedio homeopático.

5 PLANTAS MUY EFICACES CONTRA LA ALERGIA AL POLEN

Su uso debe acompañarse de medidas como evitar los días de viento, dormir con la ventana cerrada o protegerse los ojos de la polinización.

1. ÁRNICA

Un buen antihistamínico, reservado solo para su uso tópico, es la árnica, ideal para rebajar la inflamación de las mucosas y favorecer la eliminación de granos o urticarias aparecidas como resultado de una reacción alérgica por polinosis o por la picadura de insectos.

  • Planta: Arnica montana
  • Propiedades: Anthistamínica, antiinflamatoria, antialérgica, antiséptica, antimicrobiana, antifúngica
  • ¿Cómo tomarla? En infusión, tintura, extracto fluido, en crema o pomada, y como remedio homeopático

2. ASTRÁGALO CHINO

  • Planta: Astragalus membranaceus
  • Propiedades: Estimulante del sistema inmunitario, antiviral, adaptógeno y vasodilatador
  • ¿Cómo tomarlo? En decocción, tintura, cápsulas y extracto líquido

3. GORDOLOBO

Otro excelente antialergénico natural es el gordolobo, que se indica por sus efectos balsámicos y demulcentes para neutralizar los síntomas de la alergia, como la tos y la hinchazón, y para combatir la infección respiratoria.

  • Planta: Verbascum thapsus
  • Propiedades: Expectorante, antialérgico, antiinflamatorio, antitusivo, demulcente
  • ¿Cómo tomarlo? En infusión, extracto fluido, tintura, cápsulas, decocción para colirios y lavaojos, en inhalaciones y cataplasmas


4. PERPETUA

La perpetua es un clásico de herbolario para combatir las alergias de primavera.

Resulta muy eficaz para aliviar los síntomas más corrientes de la alergia, como la hinchazón y el enrojecimiento de la piel, el picor en la garganta, la tos irritativa, el lagrimeo, la conjuntivitis y los sarpullidos.

  • Planta: Helichrysum stoechas
  • Propiedades: Antialérgica, antiinflamatoria, antiséptica, antibacteriana, expectorante, antitusiva
  • ¿Cómo tomarla? En infusión, tintura o extracto líquido, como jarabe para la tos, en inhalaciones, colirios y gargarismos.


5. LLANTÉN MAYOR

La gran riqueza en mucílagos delllantén mayor, una planta medicinal común y polivalente, le confiere un notable poder como prote ctor de las mucosas del tracto respiratorio.

Se indica por ello en procesos alérgicos, por polinosis o como reacción a una picadura de insecto, que se manifiesta con rinitis, faringitis y conjuntivitis.

  • Planta: Plantago majar
  • Propiedades: Antialergénico, antihistamínico, demulcente, antibacteriano, balsámico, astringente.
  • ¿Cómo tomarla? Infusión y decocción, en maceración, tintura, extracto líquido y jarabe.

14 antioxidantes y aliados antienvejecimiento y todos sus beneficios






Las células necesitan oxígeno para que se produzcan las reacciones químicas que sostienen la vida. Por eso respiramos.

Pero en esas reacciones también se generan radicales libres, unos compuestos que atacan las proteínas, las membranas celulares y el material genético.

El 1% del oxígeno que inhalamos se convierte en radicales libres potencialmente dañinos.

Para contrarrestar su efecto, el cuerpo segrega metabolitos y enzimas antioxidantes, como el glutatión, el superóxido dismutasa y las peroxidasas.

Pero si los mecanismos de autodefensa no son del todo eficaces y circulan demasiados radicales libres, se produce un "estrés oxidante" que multiplica el riesgo de sufrir enfermedades asociadas con el envejecimiento, como las demencias seniles, la arteriosclerosis, la diabetes y el cáncer.

Y aunque no se contraigan estas enfermedades, los radicales libres –que también nos atacan desde el exterior a través de la contaminación o el humo del tabaco– son responsables del deterioro asociado al paso de los años.

Por fortuna existen alimentos ricos en antioxidantes que pueden ayudar al organismo.

Prueba de ello es que las personas que consumen más frutas y hortalizas ricas en esos compuestos poseen menos probabilidades de contraer esas dolencias y envejecen con más salud.

¿CÓMO DESCUBRIR QUÉ TIENE ANTIOXIDANTES?

Se han creado métodos para descubrir la capacidad antioxidante de los alimentos y elaborar clasificaciones de los más poderosos.

El más utilizado es el ORAC (siglas en inglés de "Capacidad de Absorción de Radicales de Oxígeno"), desarrollado por Guohua Cao, del Instituto Nacional del Envejecimiento, organismo dependiente del gobierno de los Estados Unidos.

Según Cao, los alimentos que en el laboratorio muestran más capacidad antioxidante, una vez ingeridos pueden elevar la actividad antioxidante de la sangre.

Sus experimentos han probado que, al doblar la dosis de hortalizas que se consumen, aumenta de un 10 a un 25% el poder antioxidante de la sangre.


Uno de los primeros efectos beneficiosos sobre la salud es que se mantiene en buen estado la red de vasos sanguíneos capilares, lo que previene la pérdida de memoria de largo plazo, conserva la capacidad para aprender y protege los pulmones y otros órganos.

Sin embargo, todavía se sabe muy poco sobre cómo se combinan los diferentes compuestos antioxidantes, tanto los producidos por el propio cuerpo como los aportados por los alimentos.

Las investigaciones indican que una sustancia es eficaz cuando encaja en el "sistema antioxidante" del organismo pero, si no lo hace, puede pasar sin pena ni gloria.

Se ha observado, por ejemplo, que algunas sustancias que son eficaces antirradicales en el laboratorio se descomponen a su paso por el tubo digestivo y no mejoran los niveles de antioxidantes en la sangre.

A pesar de lo mucho que todavía se desconoce, existe suficiente información para elaborar listas de compuestos y alimentos antioxidantes de eficacia comprobada.

Los antioxidantes más destacados son las vitaminas C y E, los carotenoides, los polifenoles y los minerales selenio y cinc.

Son elementos que abundan en los alimentos vegetales entre otras razones porque durante la fotosíntesis las plantas producen oxígeno puro, así que deben protegerse de sus efectos mediante una variedad de potentes antioxidantes.






¿CÓMO FUNCIONA CADA ANTIOXIDANTE?

La vitamina E se halla en los alimentos ricos en grasas y evita su enranciamiento, es decir, su oxidación. Protege las membranas celulares, que están formadas por ácidos grasos insaturados.

También evita la oxidación del colesterol malo o LDL, causa de sus efectos negativos sobre las arterias y el corazón.

Se encuentra en los aceites vegetales virgen extra –en especial, en los aceites de germen de girasol, sésamo, soja y oliva– y en el aguacate, así como en los frutos secos y semillas en general.

La vitamina C abunda en las frutas cítricas, el kiwi, la papaya y el pimiento rojo. Se considera la primera línea de defensa antioxidante en el plasma sanguíneo.

Dentro del cuerpo tiene la capacidad de regenerar la vitamina E, con la que colabora en la protección de las membranas celulares.

Además, estimula el sistema inmunitario y resulta esencial en la producción de colágeno, sustancia que secreta el tejido conjuntivo en huesos, cartílagos, tendones y ligamentos.


Ambas vitaminas, la E y la C, son sensibles a las temperaturas altas, así que para aprovecharlas al máximo conviene consumir crudos los alimentos ricos en ellas.

Muchos alimentos ricos en antioxidantes muestran tonos intensos y llamativos. El color es indicio del tipo y la concentración de sustancias antirradicales.

Cada tono revela la presencia de un tipo de antioxidante con una acción protectora específica:

  • El betacaroteno o provitamina A es un carotenoide que se halla en muchos alimentos vegetales de colores amarillo y naranja, como el boniato, el mango, la zanahoria y el albaricoque. De la misma manera que las vitaminas C y E, fortalece el sistema inmunitario y protege las membranas celulares.
  • El licopeno aporta rojos intensos o rosas brillantes a tomates, uvas rojas y rosadas, sandías y papayas. Las dietas ricas en licopeno se consideran recomendables por su capacidad para mantener a raya las enfermedades del corazón y algunos tipos de cáncer, en particular los de próstata y boca.
  • La luteína y la zeaxantina son carotenoides amarillo-verdosos que se encuentran en espinacas, berzas y coliflores. Actúan como escudos protectores de la retina frente al ataque de agentes nocivos. Así previenen las cataratas y la degeneración macular, las principales causas de ceguera evitable.

¿QUÉ Y CUÁLES SON LOS POLIFENOLES?

Los compuestos polifenólicos fueron descubiertos en 1930 por el premio Nobel Albert Szent-György.

Se denominaron en un principio vitamina P –de permeabilidad– y también vitamina C2 , porque algunos tenían propiedades similares a la vitamina C.

Desde su descubrimiento se han identificado más de cinco mil polifenoles y derivados o flavonoides.

Actualmente se sabe que poseen muchas funciones: colaboran con el sistema inmunitario, regulan el crecimiento celular, intervienen en el transporte de hormonas, colaboran en la asimilación de nutrientes y participan en los procesos de autodesintoxicación.

Los indoles y sulfuranos de varias hortalizas de color verde pertenecientes a la familia de las crucíferas (col, coliflor, brécol, nabo, berro...) inhiben el desarrollo de tumores gracias en parte a sus cualidades antioxidantes.

Este tipo de verduras contiene también altas concentraciones de fibra, vitamina C, selenio y ácido fólico, una vitamina del grupo B que en dosis suficiente previene los infartos cardiacos y los nacimientos con malformaciones del sistema nervioso.

La quercitina también es un flavonoide amarillo-verdoso, presente en la manzana, el brécol, la cereza, la uva, la col lombarda y sobre todo en las cebollas. Los ensayos muestran que previene los cánceres de pecho, piel, ovarios, pulmones y vesícula. También reduce el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, combate las alergias y alivia el asma.


El galato de epigalocatequina es uno de los polifenoles antioxidantes más potentes conocidos.

Se encuentra en el té verde y se le han descubierto efectos protectores ante las enfermedades de Parkinson, Alzheimer y artritis reumatoide.

Una hipótesis afirma que la incidencia de estas enfermedades degenerativas es menor en Asia debido a que muchos hombres y mujeres beben una media de algo más de un litro diario de té verde.

La curcumina es también un polifenol que da color amarillo a la cúrcuma, ingrediente esencial de la mezcla de especias conocida como curry.

Este pigmento ha sido utilizado por la medicina ayurvédica de la India desde hace milenios y actualmente la ciencia estudia su eficacia en el tratamiento de mielomas, cáncer de páncreas y colon, psoriasis y Alzheimer.

Para aprovechar todo su poder, la cúrcuma debe consumirse junto con pimienta, pues multiplica por 20 su absorción por parte del organismo. También aumenta su biodisponibilidad tomarla disuelta en agua o aceite caliente.

El ácido elágico se halla en las fresas y otras bayas, los frutos secos y las granadas, entre otros alimentos vegetales.

Tiene la propiedad de proteger el material genético, tanto de los agentes contaminantes ambientales como de los radicales libres de origen interno. Es por tanto una sustancia anticancerígena.

Las proantocianidinas y antocianidinas se hallan en los alimentos de color azul y púrpura, como arándanos, moras o ciruelas.

A estas sustancias se las ha denominado "súperantioxidantes" porque son 50 veces más activas que la vitamina E y 20 veces más que la vitamina C.







OTROS ALIADOS CONTRA EL ENVEJECIMIENTO

A las tres vitaminas antioxidantes (A, C y E) y los polifenoles se suman otras sustancias que presentan una notable capacidad antioxidante.

Los minerales selenio y cinc no son antioxidantes, pero son necesarios para que actúen las enzimas antirradicales libres segregadas por el cuerpo.

El selenio previene el envejecimiento de los tejidos y los cánceres de próstata y colon. Se encuentra en el germen y salvado de trigo, las cebollas, el ajo, el tomate, las coles y la levadura de cerveza.

El cinc participa en multitud de procesos: es un componente de por lo menos 200 enzimas corporales que intervienen en la obtención de energía, la reproducción, el sistema inmunitario... Abunda en semillas de sésamo y calabaza, jengibre y nueces pecanas.

La coenzima Q10 o ubiquinona es otro importante elemento antioxidante. Actúa de manera similar a la vitamina E y se ha demostrado capaz de alargar la vida de las células, protegiendo su órgano de respiración, la mitocondria.

La produce el propio cuerpo, pero los alimentos vegetales proporcionan cantidades significativas. Esto explica que los vegetarianos posean el doble de la coenzima en su plasma sanguíneo que quienes siguen una dieta más convencional.

Algunos médicos recomiendan los suplementos a las personas mayores porque la capacidad de sintetizar la coenzima se reduce con la edad.


SUPLEMENTOS, ¿SÍ O NO?

Es lógico preguntarse si una dosis muy alta de algún elemento antioxidante, en forma de suplemento, puede mantener bajo control los procesos oxidativos.

La mayoría de estudios indica que la concentración de antioxidantes en la sangre es más grande después de haber tomado alimentos completos que después de ingerir nutrientes aislados.

Si se considera la opción del suplemento, son más recomendables aquellos que ofrecen una amplia combinación de elementos antioxidantes y nutrientes.

Por otra parte, la forma de preparar un alimento influye sobre su efecto contra los radicales libres. La potencia resulta afectada, unas veces para bien y otras para mal, si es consumido fresco, tras ser congelado o cocinado de distintas maneras. Por ejemplo, una cocción suave aumenta la capacidad antioxidante de los tomates.

Otro aspecto importante es la calidad del alimento. Las verduras, hortalizas y frutas de cultivo ecológico suelen contener más cantidad de antioxidantes que las cultivadas de forma convencional, según un estudio publicado por el Journal Agricultural Food Chemistry.

La investigación sugiere que ciertos plaguicidas impiden que las plantas sinteticen los compuestos que les sirven para defenderse y que además resultan beneficiosos para la salud humana.

El estudio comparó el contenido de antioxidantes en cosechas de maíz, fresas y moras cultivadas de tres formas: convencional (con plaguicidas y fertilizantes sintéticos), sostenible (sin plaguicidas, pero con fertilizantes) y ecológica (sin plaguicidas ni fertilizantes).

Las muestras de moras y maíz ecológicos contenían entre un 50 y un 60% más de antioxidantes que los productos convencionales.



EL EJERCICIO Y EL DESCANSO TAMBIÉN SON ANTIOXIDANTES

Aunque la principal fuente de antioxidantes sean los alimentos, la estrategia contra los radicales libres no debe basarse en exclusiva en la dieta.

Si bien el ejercicio intenso de alta competición se considera oxidante, la actividad física moderada promueve el control adecuado de los radicales libres.

Las personas en buena forma consumen menos energía –por tanto, producen menos radicales– y poseen un umbral para la formación de ácido láctico –culpable de las agujetas– más elevado. La formación de radicales libres se dispara al cruzar ese umbral.

Por otra parte, es igualmente importante el descanso. Durante el sueño, el cuerpo se afana en la producción de sustancias reparadoras y antioxidantes como la hormona melatonina.

Los remedios antioxidantes mágicos no existen, pero se puede llevar un estilo de vida antioxidante para evitar el envejecimiento prematuro y muchas enfermedades.