11 diciembre 2023

¿SABES CÓMO SUFRE TU PIEL EN NAVIDADES?



Si las comidas son excesivas, con muchas calorías, provocan que la piel produzca más grasa de lo normal, es lo que se llama la secreción sebácea, y eso nos provoca acné, enrojecimiento de las mejillas y una tez apagada. Además, el exceso de azúcar típico de esta época (turrón, roscón, dulces…), provocará una disminución de la producción de colágeno y elastina lo que dará origen a una piel debilitada y con poca elasticidad. Así pues, si al azúcar le añadimos un exceso de sal, muy presente en los alimentos que hemos consumido durante estas fiestas, cuando nos miremos al espejo observaremos bolsas y ojeras debido a la retención de líquidos. ¿Te ha pasado?

Si abusamos del alcohol, estamos abriendo la puerta a una gran cantidad de toxinas que, además de dirigirse a todo nuestro organismo, también afectan al cutis. El alcohol provoca deshidratación y esto hace que desaparezca nuestra luminosidad de la piel y nos haga parecer cansados. Pero no sólo eso, también acelera el envejecimiento en la piel y, por tanto, la aparición de las temidas arrugas. Y sí, lo de siempre, estamos hablando de abusar de la bebida, una copa de vino o una cerveza no nos hará daño.

Y si con esto no teníamos suficiente, seguro que en estas fiestas habrás dormido menos de lo habitual, ¿a que sí?… Pues tienes que saber que, si hay algo que necesita la piel, ¡¡¡es dormir!!!, porque es mientras descansamos cuando la dermis aprovecha para renovarse . Si no dormimos como mínimo unas 7 horas, cuando nos miremos al espejo observaremos ojeras y bolsas, falta de luminosidad, manchas en la piel y se nos marcarán las líneas de expresión.


































¿CÓMO PODEMOS BORRAR LOS EXCESOS DE LA NAVIDAD EN NUESTRA PIEL?


Regresa a una dieta equilibrada basada en cereales, arroz, legumbres, frutas, verduras, hortalizas, grasas saludables  y proteina vegetal y/o animal.

Ingiere infusiones y caldos depurativos a base de frutas y verduras para conseguir un efecto descongestivo y antiinflamatorio.

Bebe mucha agua, entre 1,5 y 2 litros al día y toma zumos ricos en vitamina C (naranja, kiwi, mango…) para poder contrarrestar los efectos del alcohol.

¡Duerme! Entre 7 y 9 horas, lo que esté por debajo de eso no hará que tu piel esté radiante. El descanso es primordial para sentirte bien por dentro y por fuera

Ten una rutina cosmética que te llene de salud. Utiliza cosméticos saludables, antioxidantes… Para eso, tienes que mirar su INCI, su listado de ingredientes y cerciorarte de que usas algo que te aporte salud a tu piel y no lo contrario.  


Fuente: este post proviene de Cosmética natural y ecológica

La dieta y la salud mental: Cómo la nutrición afecta tu bienestar emocional

 


En la búsqueda constante de un estilo de vida saludable, a menudo nos enfocamos en aspectos físicos como la pérdida de peso, la forma física y la resistencia. Sin embargo, un componente fundamental que a veces pasa desapercibido es la conexión íntima entre la dieta y la salud mental.

La relación entre lo que comemos y cómo nos sentimos es profunda y compleja, y entenderla puede ser clave para mejorar nuestro bienestar emocional.

En este sentido, centros especializados, como la dietética en Granada o en tu lugar de residencia, desempeñan un papel crucial. Estos profesionales no solo ofrecen conocimientos especializados en nutrición, sino que también pueden adaptar sus recomendaciones a las necesidades individuales de cada persona.

Asesorarse con expertos proporciona un enfoque personalizado que tiene en cuenta no solo las características generales de la dieta, sino también los hábitos alimenticios y las tradiciones locales, maximizando así el impacto positivo en la salud mental.

Encontrar el equilibrio adecuado entre la alimentación y el bienestar emocional puede ser un viaje personal, y contar con la guía de especialistas puede marcar la diferencia en el camino hacia una vida más saludable y equilibrada.





Nutrientes esenciales para la salud mental

La conexión entre la dieta y la salud mental se basa en el principio de que el cerebro, al igual que otros órganos, requiere nutrientes específicos para funcionar de manera óptima. Los alimentos que consumimos no solo afectan nuestro peso corporal, sino que también influyen en la química cerebral y, por ende, en nuestro estado de ánimo.

1. Ácidos grasos omega-3 y su impacto en la salud mental

Los ácidos grasos omega-3, presentes en alimentos como pescado graso, nueces y semillas de chía, desempeñan un papel crucial en la salud mental. Estos ácidos grasos son componentes importantes de las membranas celulares del cerebro y están vinculados a la función cognitiva y al equilibrio emocional. La falta de omega-3 se ha relacionado con trastornos del estado de ánimo, como la depresión y la ansiedad.

2. Vitaminas del complejo B y su papel en la función cerebral

Las vitaminas del complejo B, que incluyen B6, B12 y ácido fólico, desempeñan un papel vital en la función cerebral y la salud mental. Estas vitaminas están involucradas en la síntesis de neurotransmisores, como la serotonina y la dopamina, que influyen en el estado de ánimo y la regulación emocional. Alimentos como espinacas, legumbres y carne magra son fuentes ricas en vitaminas del complejo B.

3. Antioxidantes para proteger el cerebro

Los antioxidantes, presentes en frutas y verduras coloridas, tienen propiedades neuroprotectoras. Protegen al cerebro del daño oxidativo y la inflamación, procesos que se han asociado con trastornos mentales. Incorporar una variedad de alimentos ricos en antioxidantes puede contribuir a la salud mental a largo plazo.

Impacto de la dieta en la salud mental

1. La conexión intestino-cerebro y la microbiota

La dieta no solo afecta directamente al cerebro a través de los nutrientes que proporciona, sino que también influye en la microbiota intestinal. El intestino y el cerebro están conectados por el eje intestino-cerebro, y la salud de la microbiota intestinal puede afectar la salud mental. Una dieta equilibrada con fibra y alimentos fermentados promueve una microbiota saludable, lo que se ha asociado con un menor riesgo de depresión y ansiedad.

2. El papel de los carbohidratos en el estado de ánimo

Los carbohidratos, especialmente aquellos de digestión lenta como granos enteros, tienen un impacto en la liberación de serotonina. La serotonina es un neurotransmisor que regula el estado de ánimo y la sensación de bienestar. Mantener niveles estables de glucosa en sangre mediante la ingesta de carbohidratos complejos puede ayudar a estabilizar el estado de ánimo y prevenir fluctuaciones emocionales.

3. Impacto de la dieta occidental en la salud mental

La dieta occidental, caracterizada por el consumo excesivo de alimentos ultraprocesados, azúcares añadidos y grasas saturadas, se ha asociado con un mayor riesgo de trastornos mentales. Estudios han demostrado que una dieta rica en estos alimentos puede aumentar la inflamación y afectar negativamente la función cognitiva, contribuyendo así a problemas de salud mental.

Un enfoque integral para el bienestar emocional

Al comprender cómo los alimentos que consumimos afectan nuestro cerebro y nuestra microbiota intestinal, podemos tomar decisiones informadas para mejorar nuestro bienestar emocional.

Mejorar la salud mental a través de la dieta no es solo una tendencia; es una necesidad en la búsqueda continua de un bienestar integral. Al adoptar hábitos alimenticios saludables y buscar orientación profesional, podemos nutrir tanto nuestro cuerpo como nuestra mente, creando así un equilibrio duradero para una vida plena.

Salud-Facilisimo

07 diciembre 2023

Glutamina: qué es y para qué sirven los suplementos




La glutamina es uno de los veinte aminoácidos que participan en la formación de las proteínas y tiene un papel clave en nuestra salud, en especial para el mantenimiento de los músculos, el sistema inmunitario y el metabolismo.

Nuestro cuerpo produce glutamina, pero también la podemos obtener de algunos alimentos o, en caso de que sea necesario, a partir de suplementos nutricionales.

¿QUÉ ES Y PARA QUÉ SIRVE LA GLUTAMINA?

La glutamina (o L-glutamina) es el aminoácido más abundante de nuestro cuerpo. Se produce en los músculos y a través de la sangre llega a los diferentes sistemas de órganos.

Es importante para diversas funciones corporales, como reforzar el sistema inmunitario o promover la salud intestinal y la síntesis de proteínas musculares. Además de ser clave para la reparación de tejidos, suministra energía a las células para la fabricación del tejido conjuntivo que recubre el tracto intestinal.


La glutamina no se considera un aminoácido esencial porque nuestro cuerpo lo produce, aunque también lo podemos obtener a partir de alimentos. Las principales fuentes vegetales de glutamina son las espinacas, el perejil, los frutos secos, el tofu y las legumbres. Las personas omnívoras pueden obtener glutamina de los huevos, la carne, el marisco y, sobre todo, los lácteos. En casos de déficit o una mayor necesidad de glutamina, puede recurrirse a los suplementos nutricionales.

SUPLEMENTOS DE GLUTAMINA: QUÉ SON Y CÓMO SE TOMAN

En determinados momentos, como cuando estamos sometidos a mucho estrés, nuestro cuerpo puede necesitar más glutamina de la que produce y los suplementos de glutamina pueden ser una opción. En estos casos, pueden ayudar a la función intestinal, la función inmune y otros procesos corporales.

Los suplementos de glutamina son populares entre los deportistas porque este aminoácido favorece la reparación del tejido muscular y se cree que al retrasar la aparición de las agujetas puede aumentar el rendimiento.

Se utilizan también en enfermedades como la anemia falciforme (un trastorno hereditario en el que los glóbulos rojos no pueden transportar suficiente oxígeno a todas las partes del cuerpo), quemaduras, la recuperación después de una cirugía y complicaciones del VIH/SIDA.

Los suplementos de glutamina se pueden encontrar en polvos y cápsulas y se consideran seguros cuando la dosis no supera los 14 g diarios (aunque en algunos estudios se han utilizado cantidades mayores). En general, se suele recomendar una dosis de entre 500 mg y 4 g diarios (en función de cuál sea el motivo de la suplementación) y se toma entre las comidas.

Recuerda que siempre conviene consultar a un especialista antes de tomar un suplemento para determinar si es conveniente en tu caso y en qué cantidad.

BENEFICIOS DE LA GLUTAMINA

La glutamina evita el agotamiento muscularrepara las lesiones de la mucosa digestiva e interviene en la producción de células cutáneas, de pelo y de células inmunitarias. Se cree que favorece la eliminación de ácido en los riñones y promueve la alerta mental y mejora el estado de ánimo y la memoria


 También se ha estudiado si la glutamina podría ayudar a la pérdida de peso. Un estudio de 2015 indica que 30 g de glutamina en polvo diarios (una dosis muy por encima de las necesidades diarias) disminuye la grasa corporal y la circunferencia de cintura y reduce el riesgo de enfermedad cardiaca. No obstante, son necesarias más investigaciones para confirmar este efecto.

Por otro lado, la glutamina es uno de los tres aminoácidos precursores del glutatión, un antioxidante clave para la protección de las células, especialmente las del hígado, del daño de los radicales libres y de los agentes tóxicos.

CONTRAINDICACIONES DE LA GLUTAMINA

En general, la glutamina se considera segura cuando se usa en dosis adecuadas y los efectos secundarios suelen ser leves, como hinchazón, náuseas, mareos, acidez de estómago y dolor de estómago.

Las personas con enfermedad hepática o renal, trastorno bipolar o epilepsia deben consultar al médico antes de tomar suplementos de glutamina. También las embarazadas y los niños deben contar con la aprobación del especialista antes de incluir cualquier tipo de suplemento a su dieta.

Cuerpomente