Cierto e interesante...
′′ Adulto es el que curó las heridas de su infancia, reabriéndolas para ver si hay gangrena en el lugar, mirándolas a la cara, no escondiendo al niño herido que fue, sino respetándolo profundamente reconociendo la verdad de los sentimientos pasados, que si no escuchas, se convierten en presentes, futuros, eternos.
Adulto es el que deja de buscar a sus padres por todas partes, y lo que ellos no han sabido o podido dar.
Es alguien que no busca complacencia, relaciones privilegiadas, amor incondicional, sentido por su existencia en su pareja, hijos, colegas, amigos.
Adulto es el que no crea traslados constantes, viviendo en un juego de roles perpetuo y doloroso en el que trata de llevar a los demás, a veces arrastrándolos por el cabello.
Adulto es quien asume sus responsabilidades, pero no sólo las como sellar la tarjeta, pagar las cuentas o rehacer las camas y lavadoras.
Sino las responsabilidades de sus decisiones, de sus acciones, de sus miedos y de sus fragilidad.
Responsable es quien toma su vida a cargo, sin culpar más a la crisis, al gobierno ladrón, al alcalde que calienta el sillón, a la sociedad enferma, a las palomas que traen enfermedades y al profesor de primaria que estaba frustrada y le olía el aliento.
Parecen adultos pero no lo son en absoluto.
Quien de niño fue humillado, quien pensó que no había sido amado lo suficiente, quien vivió el abandono y revive constantemente su miedo, quien conoció la ira y la violencia, quien se sintió excesivamente responsable, quien gritó sin voz , quien tenia voz pero no había nadie con oídos para escuchar, quien esperó en vano manos, quien temió las manos.
Para todos estos ′′ quién ", si no ha habido un momento de profundo reprocesamiento, si aún no se ha tenido el valor de aceptar el dolor vivido, si no estás listo para despedirte de ese niño, entonces ′′ la adultidad ′′ Es una ilusión.
Tengo miedo de estos niños heridos disfrazados de adultos, porque si un niño herido grita y patea, un adulto que niega sus emociones está listo para cualquier cosa.
Un niño herido disfrazado de adulto es una bomba de tiempo.
El odio podría estallar cíclicamente o esperar mucho tiempo por una sola y violenta detonación, otros prefieren implosionar, mutilando alma y cuerpo, para no ver.
Lo que separa al niño del adulto es la conciencia.
Lo que separa la ilusión de la conciencia es la capacidad de apoyar la onda de choque de la deflagración del dolor acumulado.
Lo que queda después de que el dolor saliera es amor, empatía, aceptación y ligereza.
No se llega a la felicidad por la mentira.
No se puede fingir que no has vivido tu infancia.
No se puede ser adulto si nadie ha visto al niño que fuimos, nosotros primero."
Emily Mignanelli