Estos son algunos de los rasgos definitivos de las personas con alta inteligencia emocional.
1. Aprenden a expresar sus sentimientos de forma clara
Saben que gestionar sus propias emociones no significa reprimirlas.
2. Se mantienen siempre a la escucha de sus propias necesidades
Tienen en claro en todo momento que las necesidades humanas van mucho más allá de las fisiológicas.
3. Se entrenan para identificar bien los sentimientos
Se esfuerzan por encontrar las diferencias y similitudes entre aquellos matices emocionales que sienten.
4. Tienden a evitar creer que los demás les quieren perjudicar
Las personas emocionalmente inteligentes no tienen por qué ser confiadas, pero a la vez no creen que los planes o las motivaciones de los demás pasen por perjudicarlas a ellas, como si esto de por si fuese un objetivo buscado.
5. Ejercen la autocrítica
Echar la vista atrás y reconocer los errores puede ser tan útil como terapéutico.
6. Dedican tiempo a aprender cómo son las otras personas
En pocas palabras, se ponen en los zapatos de la otra persona.
7. Aprenden formas de automotivarse
Experimentan con lo que resulta motivador y lo que no.
8. Pasan tiempo con las personas con las que conectan mejor
Aunque no tienen por qué buscar la compañía de las personas que se parezcan a ellas, sino con aquellas con las que encajen mejor.
9. Analizan la viabilidad de sus aspiraciones
Tienden a decidir en qué proyectos volcar su tiempo y sus esfuerzos dependiendo de las posibilidades de éxito esperadas, para no trabajar sobre un marco irreal de expectativas.
10. No tienen miedo a conocer a personas nuevas
Son capaces de abrirse hacia nuevas experiencias.
Fuente: Psicología y mente