El estrés, las malas posturas, un movimiento brusco o cargar peso puede dañar los músculos y acabar por provocar una contractura. Se trata de un estado de rigidez o contracción que padece el músculo y que puede resultar muy doloroso. Además, pueden tener un largo periodo de recuperación que nos trastorna nuestro ritmo de vida.
Un primer consejo general es no estar mucho tiempo en la misma postura y hacer estiramientos y pequeños masajes de vez en cuando. También has de acordarte de hacer calentamiento antes de cualquier ejercicio físico.
Sin embargo, si quieres asegurarte más o no has podido evitarlas, gracias a los consejos que nos da el especialista en medicina natural Javier Mansa podrás prevenirlas o aliviarlas.
REMEDIOS NATURALES PARA LAS CONTRATURAS MUSCULARES
- Aceite de hipérico. Se trata de un buen preparado que conviene que tengamos siempre a mano. Se tarda varios días en estar a punto, así que no esperes a que te haga falta y tenlo ya en tu botiquín. Se prepara con 50 g de las flores y con hojaspequeñas troceadas. Se introduce en un envase de 250 cm3 de cristal, y se termina de llenar con aceite de almendras. Se deja reposar en un armario protegido del calor y la luz, durante 20 días. Pasado este tiempo se cuela, y está listo para usar. No aplicar antes de la exposición al sol.
- Cataplasma de arcilla roja. Prepárala en un plato hondo o cuenco, con arcilla roja en polvo, y añade poco a poco agua (fría o caliente en función del tipo de contractura). Has de ir añadiendo agua hasta conseguir una pasta espesa, homogénea y sin grumos. Aplícala en la zona afectada y deja actuar durante 30 a 60 minutos. Se aplica 1 o 2 veces al día, durante 2 a 5 días. Pero debes evitarla si hay heridas o daños en la piel.
- Magnesio. Relaja la actividad del tejido muscular. Se recomiendan de 200 a 400 mg de magnesio, repartidos en 1 o 2 tomas al día. No la tomes durante mucho tiemponi en caso de insuficiencia renal.
PLANTAS MEDICINALES PARA RELAJAR LOS MÚSCULOS
- Harpagofito. Tiene virtudes analgésicas, es decir que suaviza el dolor, y antiinflamatorias. Una combinación ideal que el músculo vaya recuperándose. Ha que tomar de 400 a 800 mg de extracto seco al día, repartido en 1 o 2 tomas. Hay que desechar este tratamiento si se sufre de úlcera gastroduodenal. Tampoco es aconsejable durante el embarazo y la lactancia.
- Valeriana. Una de las plantas más utilizadas para los casos de estrés. Su actividad relajante y antiespasmódica nos puede ir bien sobre la musculatura y de esta manera ayudar a tratar las contracturas. Se usan de 300 a 900 mg de extracto seco de la raíz, repartido en 1 a 3 tomas diarias. No la tomes en el embarazo.
BAÑOS AROMÁTICOS RELAJANTES
- Baño de sales. Un baño relajante y que te ayudara a reducir las molestias de la contractura. Se prepara en agua caliente a la que se le añade 250 gr. de sales de epsom. Previamente, para reforzar sus efectos generales, añade a las sales 5 gotas de aceite esencial de mejorana, otras tantas de esencia de romero y otras 5 gotas de lavanda. Una nota importante, previamente tenemos que echar los aceites esenciales en las sales de Epsom, antes de verterlos en el agua de baño.
- Baño de sal gorda. Se trata de otro remedio clásico con virtudes relajantes de toda la musculatura. Se llena la bañera con agua caliente. Se añade la sal gorda a la que también se pueden incluir algun aceite esencial, como la verbena o la lavanda, para darle un toque aromático. Hay que permancer al menos diez minutossumergidos para que el efecto relajante surta.
- Baño de vinagre. Tiene propiedades también relajantes similares al de sal gorda. Simplemente se sustituye la sal y los aceites esenciales por un par de vasos de vinagre.
- Saber Vivir