Cada nuevo día que empieza es una nueva oportunidad también para agradecer... Hay mucho que agradecer; abre tus ojos, mira a tu alrededor, y considera cuán bendecido estás.
Al hacerlo, te encontrarás lleno de una abrumadora sensación de amor y gratitud, y toda tu vida asumirá un nuevo sentido. La gente que te rodea te importará más porque tu corazón está lleno de amor por ellos, y podrás comprenderlos y tolerarlos más. Te descubrirás agradecido hacia ellos, por su amor y por su compañía, por ser simplemente quienes son. Tus ojos se abrirán a toda la belleza y armonía que te
rodean, a las maravillas de la naturaleza.
Verás con ojos que de verdad ven; oirás con oídos que de verdad oyen; y hablarás con
palabras que de verdad son necesarias llenas de amor y comprensión. La vida será buena contigo porque no darás nada por hecho sino que mostrarás aprecio hacia todo y podrás ver el universo en todas las cosas.
Y es que agradecer nunca estará demás.
Que sea un día para agradecer lo bueno, lo malo, lo mucho, lo poco, la alegría y la tristeza porque es justamente eso lo que te hace grande
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