Las bayas acaí, también llamadas «frutos asaí», provienen de la palmera Euterpe oleracea, cultivada en América del Sur, específicamente en los países de la región del Amazonas, donde son un alimento básico. Su aspecto es similar al de una uva, con un color púrpura azulado, pero con una pulpa amarilla que recubre una semilla grande.
Su tamaño es de unos 2,5 centímetros y tienen un sabor terroso que se ha descrito como una combinación entre el sabor de las moras y del chocolate amargo. Dado que es un alimento perecedero, suele exportarse la pulpa congelada, como polvo seco o en zumo. ¿Te interesa saber más sobre sus propiedades nutricionales y beneficios? ¡Sigue leyendo!
Propiedades nutricionales de las bayas de acaí
Gran parte de los beneficios de las bayas de acaí para la salud se atribuyen a sus propiedades nutricionales. En particular, y según datos recopilados por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), 100 gramos de las bayas aportan lo siguiente:
- Calorías: 70.
- Grasa: 5 gramos.
- Grasa saturada: 1,5 gramos.
- Carbohidratos: 4 gramos.
- Azúcar: 2 gramos.
- Fibra: 2 gramos.
- Vitamina A: 15 % de los valores diarios recomendados.
- Calcio: 2 % de los valores diarios recomendados.
Entre tanto, información divulgada en Archivos Latinoamericanos de Nutrición sugieren que el acaí también concentra otros minerales traza como el cromo, el zinc, el hierro, el cobre, el magnesio, el potasio y el fósforo.
Sumado a esto, es una fuente significativa de antiocianinas, que no solo son las responsables de su color característico, sino de sus propiedades antioxidantes.
Beneficios de las bayas de acaí
Hasta hace algunos años, las bayas de acaí eran conocidas como un «superalimento», debido a su composición nutricional. Dado que aportan más antioxidantes que otros frutos, como los arándanos y las fresas, se llegó a afirmar que eran curativas. Sin embargo, nutricionistas y expertos en salud hicieron algunas aclaraciones al respecto.
Si bien es cierto que son un alimento nutritivo, no hay suficientes evidencias para afirmar que pueden curar enfermedades. Agregarlas en la dieta ayuda a mejorar la calidad nutricional, más no reemplazan tratamientos médicos ni los efectos de mantener una alimentación sana y variada.
Dicho de otro modo, el acaí puede aportar importantes efectos en la salud, siempre y cuando esté incluido en el marco de una dieta balanceada. ¿Y cuáles son sus principales efectos? A continuación los detallamos.
Ayudan a combatir el estrés oxidativo
Una de las principales propiedades de las bayas de acaí es su actividad antioxidante. Mientras que los arándanos tiene una puntuación de 4669 de capacidad de absorción de radicales de oxígeno (ORAC), 100 gramos de pulpa congelada de acaí tienen un ORAC de 15 405.
Estos efectos se atribuyen a su concentración de antocianinas que, una vez asimiladas, ayudan a contrarrestar los efectos del estrés oxidativo. A mediano y largo plazo esto se traduce en un riesgo disminuido de enfermedades crónicas, como las cardiovasculares, las metabólicas y el cáncer.
Contribuyen a regular el colesterol
Incluir estos frutos en la dieta regular puede ayudar a disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares. En estudios hechos en animales, como uno publicado en Nutrition Research, se determinó que la suplementación con acaí estabiliza los niveles de colesterol, ya que reduce el total y LDL o malo.
Entre tanto, una investigación en Nutrition Journal encontró que los adultos con sobrepeso que consumieron batidos con acaí dos veces al día durante un mes tuvieron más control de su perfil lipídico al finalizar el estudio. Aún así, se sugieren más pruebas para corroborar estos efectos.
Ayudan a estimular las funciones cerebrales
Los compuestos bioactivos de este alimento, en especial sus antioxidantes, ayudan a proteger al cerebro de los efectos negativos del envejecimiento. Una investigación en Journal of Agricultural and Food Chemistry detalla que las bayas de acaí mitigan los daños de la inflamación y la oxidación de las células cerebrales.
Por lo anterior, se dice que son idóneas para proteger la memoria y mejorar los procesos de aprendizaje. Los datos anecdóticos también señalan que su zumo y derivados actúan como energizante natural, lo que mejora el estado de alerta.
Otros posibles beneficios
En la medicina natural, las bayas de acaí se emplean contra varias dolencias y enfermedades. No es un tratamiento de primera línea, pero parece ser que es coadyuvante a la hora de reducir algunos síntomas.
Coincidiendo con una publicación de la corporación estadounidense WebMD, hay evidencia insuficiente de lo siguiente:
- Mejor rendimiento atlético.
- Control de los niveles de glucosa en sangre.
- Disminución del riesgo de síndrome metabólico.
- Prevención del envejecimiento de la piel.
- Control de la disfunción eréctil.
- Alivio de la artrosis.
Contraindicaciones de las bayas de acaí
La Clínica Mayo sugiere que las bayas de acaí son seguras para la mayoría de los adultos sanos. Aún así, recomienda evitar su consumo en caso de embarazo o lactancia, ya que se desconoce cuáles son sus efectos en estas etapas. Por otro lado, no se conocen efectos secundarios por el consumo del fruto.
Algunos informes relacionan la ingesta de jugo de acaí crudo con brotes de la enfermedad conocida como «tripanosomiasis americana» o «enfermedad de Chagas», pero no hay pruebas concluyentes.
¿Cómo consumir las bayas de acaí?
Las bayas de acaí y los suplementos derivados suelen encontrarse en tiendas saludables de alimentos. La mejor manera de consumirlas es frescas, pero tienen una vida útil corta. Por eso suelen encontrarse en las siguientes presentaciones:
- Pulpa congelada.
- Comprimidos.
- Polvo.
- Productos alimentarios (como batidos, jaleas o bebidas energizantes).
La pulpa congelada se puede emplear para preparar smoothies caseros, por ejemplo, con leche o avena. El polvo, por su parte, se puede agregar en ensaladas, batidos listos, postres y muchas otras recetas.
¿Qué debes recordar sobre las bayas de acaí?
A pesar de las ideas que ha promovido el marketing sobre las bayas de acaí, este fruto no es curativo ni tiene súper propiedades. Aún así, se valora por su composición nutricional, que sin dudas mejora la calidad de la dieta.
Su consumo regular se relaciona con la prevención de enfermedades y una mejor concentración mental. Es seguro para la mayoría de las personas, pero se recomienda su ingesta moderada. ¡Tenlo en cuenta!
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