La artrosis es la enfermedad articular más extendida y más frecuente. Los primeros síntomas generalmente aparecen a partir de los 40-50 años, pero la enfermedad a menudo comienza en edades más tempranas de la vida. Afecta al 13 % de la población general entre las que están el 70% de la población de más de 65 años.
Esta patología se caracteriza por el dolor, mecánico y diurno y la dificultad de efectuar movimientos articulares. A nivel de la articulación, la superficie del cartílago se agrieta, se pulveriza y acaba por desaparecer. Seguidamente se forman espolones óseos (pequeñas proliferaciones de nuevo hueso) y perjudican los movimientos.
De la misma forma, la artritis es una inflamación aguda o crónica de las articulaciones de origen reumático o infeccioso. No designa la patología catalogada bajo el nombre de artrosis sino un signo clínico de una de las numerosas enfermedades articulares.
Cerca del 10 % de la población padece artritis. Aunque las causas sean múltiples, la artritis puede tener como última consecuencia:
> el deterioro de las superficies articulares
> la pérdida progresiva de la función articular
De la misma forma, la artritis es una inflamación aguda o crónica de las articulaciones de origen reumático o infeccioso. No designa la patología catalogada bajo el nombre de artrosis sino un signo clínico de una de las numerosas enfermedades articulares.
Cerca del 10 % de la población padece artritis. Aunque las causas sean múltiples, la artritis puede tener como última consecuencia:
> el deterioro de las superficies articulares
> la pérdida progresiva de la función articular
¿Qué complementos se utilizan para tratar la artrosis y/o artritis?
- SULFATO DE GLUCOSAMINA
El sulfato de glucosamina es una sustancia natural presente en el líquido que rodea las articulaciones.
En la naturaleza la glucosamina se encuentra también en la quitina de los mariscos (crustáceos), pescado y cartílagos bovinos.
El sulfato de glucosamina es utilizado para el alivio de los síntomas de las enfermedades articulares (como la artrosis) así como para disminuir su evolución. Tiene varios efectos que permiten enlentecer la aparición de la artrosis: retrasa la degradación de los cartílagos, estimula la fabricación de las células, al formar parte de ellas y posee un efecto antiinflamatorio.
- SULFATO DE CONDROITINA
La condroitina es uno de los principales constituyentes del cartílago. Es producida naturalmente por el organismo. Está presente en los huesos, la piel, la córnea y la membrana de las arterias. Contribuye a la formación y al mantenimiento del tejido cartilaginoso. El papel de este tejido es asegurar la retención de agua en el cartílago y su elasticidad, así como la solidez y la flexibilidad de las articulaciones.
La principal función del sulfato de condroitina es mantener la presión osmótica absorbiendo el agua y ayudar a hidratar el cartílago. Contribuye también a la flexibilidad y a la elasticidad del hueso. Lo que es todavía más importante, es que sirve de agente condroprotector protegiendo el cartílago contra las reacciones enzimáticas y contra los daños debidos a los radicales libres.
- METILSULFONILMETANO
Se ha demostrado que el MSM tiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. Es un compuesto azufrado presente en muchos alimentos como frutas, algas y marisco.
El MSM actúa aumentando los beneficios de la Glucosamina, al mantener la integridad del cartílago, así como la flexibilidad y la movilidad de las articulaciones.
- ÁCIDO HIALURÓNICO
Es uno de los principales componentes de la matriz extracelular. Contribuye de modo significativo a la proliferación y a la migración de las células, por lo que es una importante glucoproteína de la homeostasis articular.
El ácido hialurónico se utiliza para tratar la artrosis de rodilla. Tales tratamientos son administrados en forma de inyecciones en la articulación de la rodilla y se les atribuye la propiedad de aumentar la viscosidad del líquido sinovial y de lubricar así la articulación.
- COLÁGENO
El colágeno es la proteína más abundante de nuestro cuerpo y un componente esencial de los huesos, ligamentos, tendones, cartílagos y piel. También forma parte de la pared de los vasos sanguíneos, córnea ocular, dentina, encías y cuero cabelludo, así como del tejido conectivo que envuelve y protege nuestros músculos y órganos vitales.
Con el paso del tiempo, la producción de esta proteína por parte de las células que la generan se reduce. Así hay complementos nutricionales que proporcionan colágeno desgrasado y predigerido que aumentan la biodisponibilidad del mismo.
Todos estos complementos pueden encontrarse en el mercado aislados o combinados entre ellos para aumentar su potencia o con otros complementos como el harpagofito, cúrcuma, silicio… potenciando la acción antiinflamatoria del preparado.
- SULFATO DE GLUCOSAMINA
El sulfato de glucosamina es una sustancia natural presente en el líquido que rodea las articulaciones.
En la naturaleza la glucosamina se encuentra también en la quitina de los mariscos (crustáceos), pescado y cartílagos bovinos.
El sulfato de glucosamina es utilizado para el alivio de los síntomas de las enfermedades articulares (como la artrosis) así como para disminuir su evolución. Tiene varios efectos que permiten enlentecer la aparición de la artrosis: retrasa la degradación de los cartílagos, estimula la fabricación de las células, al formar parte de ellas y posee un efecto antiinflamatorio.
- SULFATO DE CONDROITINA
La condroitina es uno de los principales constituyentes del cartílago. Es producida naturalmente por el organismo. Está presente en los huesos, la piel, la córnea y la membrana de las arterias. Contribuye a la formación y al mantenimiento del tejido cartilaginoso. El papel de este tejido es asegurar la retención de agua en el cartílago y su elasticidad, así como la solidez y la flexibilidad de las articulaciones.
La principal función del sulfato de condroitina es mantener la presión osmótica absorbiendo el agua y ayudar a hidratar el cartílago. Contribuye también a la flexibilidad y a la elasticidad del hueso. Lo que es todavía más importante, es que sirve de agente condroprotector protegiendo el cartílago contra las reacciones enzimáticas y contra los daños debidos a los radicales libres.
- METILSULFONILMETANO
Se ha demostrado que el MSM tiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. Es un compuesto azufrado presente en muchos alimentos como frutas, algas y marisco.
El MSM actúa aumentando los beneficios de la Glucosamina, al mantener la integridad del cartílago, así como la flexibilidad y la movilidad de las articulaciones.
- ÁCIDO HIALURÓNICO
Es uno de los principales componentes de la matriz extracelular. Contribuye de modo significativo a la proliferación y a la migración de las células, por lo que es una importante glucoproteína de la homeostasis articular.
El ácido hialurónico se utiliza para tratar la artrosis de rodilla. Tales tratamientos son administrados en forma de inyecciones en la articulación de la rodilla y se les atribuye la propiedad de aumentar la viscosidad del líquido sinovial y de lubricar así la articulación.
- COLÁGENO
El colágeno es la proteína más abundante de nuestro cuerpo y un componente esencial de los huesos, ligamentos, tendones, cartílagos y piel. También forma parte de la pared de los vasos sanguíneos, córnea ocular, dentina, encías y cuero cabelludo, así como del tejido conectivo que envuelve y protege nuestros músculos y órganos vitales.
Con el paso del tiempo, la producción de esta proteína por parte de las células que la generan se reduce. Así hay complementos nutricionales que proporcionan colágeno desgrasado y predigerido que aumentan la biodisponibilidad del mismo.
Todos estos complementos pueden encontrarse en el mercado aislados o combinados entre ellos para aumentar su potencia o con otros complementos como el harpagofito, cúrcuma, silicio… potenciando la acción antiinflamatoria del preparado.
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