Buenos Hábitos
La piel seca es una afección dermatológica bastante frecuente que va más allá de un simple problema estético. La piel seca se manifiesta a menudo durante una estación del año por ejemplo en el invierno o el verano. Se puede tratar de un problema pasajero, pero en muchos casos esta afección llega a ser crónica.
Nuestra piel juega un rol protector contra las agresiones externas y ayuda a interactuar con el medio ambiente (otros organismos vivos, el calor, el frío, los rayos UV, los traumatismos, etcétera). Cuando la piel presenta un problema, por ejemplo cuando se vuelve seca, estas funciones fisiológicas pueden verse disminuidas.
Las personas que sufren de piel seca tienen naturalmente menos sustancias grasas en la capa externa de la piel lo que provoca una pérdida importante de agua (deshidratación) y vuelve a la piel más sensible.
Varios factores son responsables de la piel seca como por ejemplo el sol, el aire frío y el viento, la exposición demasiado frecuente al agua, bañarse con agua demasiado caliente, la utilización de ciertos jabones, la ingesta de medicamentos o el envejecimiento.
Pero la piel seca también puede tener un origen genético o al mismo tiempo, puede aparecer como consecuencia de enfermedades más graves.
Veremos algunos de los casos más importantes:
Tiroides: los primeros síntomas de la tiroides son los que modifican la apariencia física, tanto en el caso de hipotiroidismo o hipertiroidismo, una de las primeras manifestaciones tiene que ver con la sequedad de la piel. Casi el 97% de los afectados por esta enfermedad, dan cuenta de piel seca y amarillenta que luego va tomando un color grisáceo.
En el rostro se manifiesta sobre todo alrededor de los ojos y en la zona del mentón y las arrugas se hacen más pronunciadas. Aparecen nuevas arrugas a veces acompañadas de otros trastornos cutáneos como el eccema o el acné.
El doctor Willem explica: “esto surge como consecuencia de la acumulación de grasas y desechos no eliminados en los tejidos después de un descenso de las hormonas tiroideas en el cuerpo”.
Esta afección de la sequedad puede alcanzar incluso el cabello que comenzamos a notarlo quebradizo y áspero y también a las uñas que comienzan estriarse y luego romperse.
Riñones:
La insuficiencia renal es una enfermedad de evolución progresiva y a menudo silenciosa. Aparece cuando la capacidad de filtración de la sangre por parte de los riñones se vuelve insuficiente. Los líquidos y los desechos se acumulan en el organismo.
Estos desechos que no se pueden eliminar a través de los riñones vuelven a la sangre y dentro del torrente sanguíneo comienzan a ocasionar fuertes picazones que no afectan únicamente a la piel sino que también se sienten en músculos y huesos.
Es común que aparezcan al mismo tiempo erupciones cutáneas.
Cáncer de piel:
Las primeras manifestaciones de la enfermedad a menudo pasan inadvertidas. La mayoría de los cánceres de piel no provoca ni dolor, ni picazón, ni sangrado. Y precisamente esto es algo a tener en cuenta ya que las células que componen los melanomas se reproducen con rapidez, superando a cualquier otra célula del cuerpo.
Es por eso que la detección temprana es un factor determinante para evitar que se propague a otros lugares del cuerpo e incluso que afecte órganos internos.
Principalmente, suelen aparecer en zona de la cara, alrededor de los ojos o en el cuello. Estos lugares son los que están más expuestos a los factores climáticos y en especial al sol, principal responsable de esta enfermedad de la piel.
Algunos tipos de carcinomas se pueden detectar por medio de los siguientes signos:
- Una placa de piel rosada o blancuzca, rugosa y seca.
- Un nódulo rosado o blancuzco, firme y con aspecto de verruga.
- Una úlcera de la piel que no cura.
Diabetes:
La mayoría de las enfermedades de la piel pueden ser prevenidas o tratadas con facilidad si son detectadas de manera precoz.
Los síntomas de la diabetes pueden ser el origen de los problemas de la piel. De esta manera, las terminales nerviosas que se ven afectadas van a disminuir las conexiones entre la piel y el sistema nervioso central. Frente a estos ataques externos, la piel no podrá defenderse de manera adecuada generando con mayor facilidad infecciones, sequedad o agravamiento de las heridas. La producción de transpiración también se ve limitada, algo que incrementa en ocasiones la sequedad cutánea.
Síntomas.
Los síntomas de la piel seca son muy fáciles de constatar. La piel se ve rosada o blancuzca, asociada a fisuras y escamas. Se siente una picazón intensa que incluso puede llegar a ser dolorosa.
La sequedad vuelve a la piel más débil y fina o más gruesa y sensible dependiendo de las condiciones meteorológicas pero también como consecuencia de la utilización de productos equivocados. A menudo también observamos pérdida de elasticidad.
Es ahí cuando se instala un círculo vicioso, ya que a fuerza de rascarnos aumentamos el dolor y cuando nos duele nos pica y queremos seguir rascándonos. Es por eso que necesitamos resolver el problema de la piel seca lo más rápido posible.
Muchas veces los síntomas son transitorios y están ligados a la estación del año, por ejemplo una persona puede sufrir de piel seca cada invierno pero no durante el resto de las estaciones.
Si bien existen numerosas opciones en el mercado farmacológico para combatir la piel seca, nos inclinamos por lo natural y te vamos a recomendar algunas plantas medicinales que pueden ser muy útiles para aliviar la sequedad de la piel.
- Aceite de almendra dulce.
- Onagro en aceite, pomada, crema o cápsulas.
- Borraja en aceite, crema, pomada o cápsulas.
- Aloe vera en crema o pomada.
- Manzanilla en infusión, crema o pomada.
- Soja en aceite, crema, pomada o cápsulas.
- Ylang Ylang o flor de cananga en aceite.
Los cambios repentinos en la piel, aparición de manchas, lunares extraños con cambios de color o tamaño, al igual que lesiones, deben ser consultadas sin demora con un dermatólogo para determinar origen y tratamiento.
Nuestra piel juega un rol protector contra las agresiones externas y ayuda a interactuar con el medio ambiente (otros organismos vivos, el calor, el frío, los rayos UV, los traumatismos, etcétera). Cuando la piel presenta un problema, por ejemplo cuando se vuelve seca, estas funciones fisiológicas pueden verse disminuidas.
Las personas que sufren de piel seca tienen naturalmente menos sustancias grasas en la capa externa de la piel lo que provoca una pérdida importante de agua (deshidratación) y vuelve a la piel más sensible.
Varios factores son responsables de la piel seca como por ejemplo el sol, el aire frío y el viento, la exposición demasiado frecuente al agua, bañarse con agua demasiado caliente, la utilización de ciertos jabones, la ingesta de medicamentos o el envejecimiento.
Pero la piel seca también puede tener un origen genético o al mismo tiempo, puede aparecer como consecuencia de enfermedades más graves.
Veremos algunos de los casos más importantes:
Tiroides: los primeros síntomas de la tiroides son los que modifican la apariencia física, tanto en el caso de hipotiroidismo o hipertiroidismo, una de las primeras manifestaciones tiene que ver con la sequedad de la piel. Casi el 97% de los afectados por esta enfermedad, dan cuenta de piel seca y amarillenta que luego va tomando un color grisáceo.
En el rostro se manifiesta sobre todo alrededor de los ojos y en la zona del mentón y las arrugas se hacen más pronunciadas. Aparecen nuevas arrugas a veces acompañadas de otros trastornos cutáneos como el eccema o el acné.
El doctor Willem explica: “esto surge como consecuencia de la acumulación de grasas y desechos no eliminados en los tejidos después de un descenso de las hormonas tiroideas en el cuerpo”.
Esta afección de la sequedad puede alcanzar incluso el cabello que comenzamos a notarlo quebradizo y áspero y también a las uñas que comienzan estriarse y luego romperse.
Riñones:
La insuficiencia renal es una enfermedad de evolución progresiva y a menudo silenciosa. Aparece cuando la capacidad de filtración de la sangre por parte de los riñones se vuelve insuficiente. Los líquidos y los desechos se acumulan en el organismo.
Estos desechos que no se pueden eliminar a través de los riñones vuelven a la sangre y dentro del torrente sanguíneo comienzan a ocasionar fuertes picazones que no afectan únicamente a la piel sino que también se sienten en músculos y huesos.
Es común que aparezcan al mismo tiempo erupciones cutáneas.
Cáncer de piel:
Las primeras manifestaciones de la enfermedad a menudo pasan inadvertidas. La mayoría de los cánceres de piel no provoca ni dolor, ni picazón, ni sangrado. Y precisamente esto es algo a tener en cuenta ya que las células que componen los melanomas se reproducen con rapidez, superando a cualquier otra célula del cuerpo.
Es por eso que la detección temprana es un factor determinante para evitar que se propague a otros lugares del cuerpo e incluso que afecte órganos internos.
Principalmente, suelen aparecer en zona de la cara, alrededor de los ojos o en el cuello. Estos lugares son los que están más expuestos a los factores climáticos y en especial al sol, principal responsable de esta enfermedad de la piel.
Algunos tipos de carcinomas se pueden detectar por medio de los siguientes signos:
- Una placa de piel rosada o blancuzca, rugosa y seca.
- Un nódulo rosado o blancuzco, firme y con aspecto de verruga.
- Una úlcera de la piel que no cura.
Diabetes:
La mayoría de las enfermedades de la piel pueden ser prevenidas o tratadas con facilidad si son detectadas de manera precoz.
Los síntomas de la diabetes pueden ser el origen de los problemas de la piel. De esta manera, las terminales nerviosas que se ven afectadas van a disminuir las conexiones entre la piel y el sistema nervioso central. Frente a estos ataques externos, la piel no podrá defenderse de manera adecuada generando con mayor facilidad infecciones, sequedad o agravamiento de las heridas. La producción de transpiración también se ve limitada, algo que incrementa en ocasiones la sequedad cutánea.
Síntomas.
Los síntomas de la piel seca son muy fáciles de constatar. La piel se ve rosada o blancuzca, asociada a fisuras y escamas. Se siente una picazón intensa que incluso puede llegar a ser dolorosa.
La sequedad vuelve a la piel más débil y fina o más gruesa y sensible dependiendo de las condiciones meteorológicas pero también como consecuencia de la utilización de productos equivocados. A menudo también observamos pérdida de elasticidad.
Es ahí cuando se instala un círculo vicioso, ya que a fuerza de rascarnos aumentamos el dolor y cuando nos duele nos pica y queremos seguir rascándonos. Es por eso que necesitamos resolver el problema de la piel seca lo más rápido posible.
Muchas veces los síntomas son transitorios y están ligados a la estación del año, por ejemplo una persona puede sufrir de piel seca cada invierno pero no durante el resto de las estaciones.
Si bien existen numerosas opciones en el mercado farmacológico para combatir la piel seca, nos inclinamos por lo natural y te vamos a recomendar algunas plantas medicinales que pueden ser muy útiles para aliviar la sequedad de la piel.
- Aceite de almendra dulce.
- Onagro en aceite, pomada, crema o cápsulas.
- Borraja en aceite, crema, pomada o cápsulas.
- Aloe vera en crema o pomada.
- Manzanilla en infusión, crema o pomada.
- Soja en aceite, crema, pomada o cápsulas.
- Ylang Ylang o flor de cananga en aceite.
Los cambios repentinos en la piel, aparición de manchas, lunares extraños con cambios de color o tamaño, al igual que lesiones, deben ser consultadas sin demora con un dermatólogo para determinar origen y tratamiento.
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